El fabricante sueco de vehículos industriales Volvo cerró
los seis primeros meses del año con un beneficio neto de 9.035 millones de
coronas (1.070 millones de euros), lo que supone una disminución del 4,5%
respecto al mismo período de 2011.
En contraste, la cifra de negocio de la multinacional
sueca se elevó a 162.742 millones de coronas (19.260 millones de euros), lo que
representa una progresión del 8% en relación con el mismo período del ejercicio
precedente.
En el segundo trimestre, las ganancias de Volvo bajaron
un 5,7%, hasta situarse en 4.943 millones de coronas (585 millones de euros),
mientras que la cifra de negocio creció un 6%, hasta 83.904 millones de coronas
(9.930 millones de euros).
El presidente y consejero delegado de Volvo, Olof
Persson, explicó que las ventas de camiones de la compañía bajaron un 2% en el
segundo trimestre del año, con 58.800 vehículos, como consecuencia de la
debilidad de la demanda.
Por su parte, la cartera de pedidos sufrió en el segundo
trimestre de 2012 una fuerte caída del 19%, hasta 53.000 unidades, como
consecuencia, según Persson, del elevado nivel registrado en Norteamérica en el
mismo período de 2011.
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