El verano es una de las épocas
del año más propicias para los robos de vehículos. Los largos períodos fuera
del hogar, paradas en áreas de servicio o estacionamientos en párquins con
escasa vigilancia, entre muchos otros factores, se convierte en estos meses en
un riesgo para algunos conductores que ven cómo su coche es sustraído.
