
El
club automovilístico explica que esta situación, además de un impacto
económico, también tiene un efecto negativo para el conductor, así como para la
industria del automóvil, para la seguridad vial y para el medio ambiente.
El
documento resalta que este fraude ocasiona que el consumidor final pague de más
por el coche de ocasión, así como que se enfrente a un peligro para la
seguridad vial, ya que el vehículo tiene más uso del reflejado.