“El huevo de Colón”
En el artículo anterior, “Accidente”, cuando la voz de la
locutora nos informó del suceso ocurrido en la glorieta del Parque Alcosa, habíamos
dejado detrás el monumento de “El huevo de Colón”. Aunque casi todos conocen la
historia o leyenda del famoso “huevo”, me parece que vendría muy bien
recordarla, aquí, para solaz y entretenimiento de los lectores.
Postrimerías
del siglo XV. Cuenta la leyenda —por su dudosa
verosimilitud, no tiene el rango de historia— que estando Cristóbal Colón a la
mesa con nobles españoles —invitados por el cardenal Mendoza en el año 1493—,
un conde amigo del cardenal le dijo: “Sr. Colón, si vuestra merced no hubiera
encontrado las Indias, no nos habría faltado una persona que hubiera emprendido
una aventura similar a la suya…” Colón no respondió a esas palabras y pidió que
le trajeran un huevo; colocó el huevo que había pedido en lo alto de la mesa e
invitó a los presentes a que trataran de ponerlo de pie, sin valerse de ningún apoyo.
Todos lo intentaron sin éxito. Entonces Colón tomó el huevo, le dio un
golpecito contra la mesa, agrietó la cáscara en el extremos más pequeño y lo
puso de pie. Los asistentes quedaron confundidos y el conde indignado: “¡Eso es
demasiado fácil!” “A veces, el logro de una hazaña no es difícil, lo complicado
es emprenderla”, sentenció Colón.