MV AGUSTA ZAGATO POR ENGARGO

 El carrocero italiano, con sede en Milán, lleva desde 1919 haciendo soñar a los amantes de las creaciones únicas con modelos muy especiales, de escasa producción casi todos o incluso one-off (piezas únicas, generalmente hechas por encargo).

Hasta el momento todo lo que habíamos visto de Zagato eran diseños de coches deportivos. Las cuatro ruedas han sido, desde siempre, su predilección. Sin embargo, hoy nos sorprende con su primer trabajo realizado sobre una motocicleta. Evidentemente, para semejante puesta de largo no podía servir cualquier modelo. El carrocero ha creado una auténtica obra de arte a partir de una MV Agusta F4, una de las motos deportivas más codiciadas y elegantes del momento, a la que ha vestido con sumo cuidado hasta lograr un resultado estremecedor a la vista.

¿Y cuál es el objetivo de todo esto? ¿Lanzar un modelo de producción en serie? ¿Acaso una edición limitada a pocas unidades? Ni lo uno ni lo otro. La MV Agusta Zagato se ha fabricado a petición de un acaudalado empresario japonés que, simplemente, quería tener algo único en su garaje. Desconocemos el coste de una operación como esta, pero suponemos que no será precisamente bajo teniendo en cuenta la exclusividad del proyecto.

Diseño retro futurista

Bajo las tripas de la MV Agusta F4 de serie se esconde un motor tetracilíndrico de 1.000 cc con casi 200 CV, que aseguran unas prestaciones de auténtica deportiva; sobre el chasis aparecen las novedades: carenado, escape y depósito, entre otros elementos, han sido rediseñados para ofrecer una imagen distintiva. Al parecer el cliente quería algo que no fuera excesivamente moderno ni clásico, capaz de aguantar bien el paso del tiempo. Y lo cierto es que a nosotros nos parece que tiene bastante de ambas cosas, un especie de diseño retro futurista que, en cualquier caso, resulta sumamente atractivo. Las líneas típicas de cualquier coche de Zagato quedan expuestas en esta moto italiana, en la que la línea curva es la gran protagonista.

La MV Agusta Zagato acaba de ser expuesta en el concurso de elegancia Chantilly Arts & Elegance y a estas alturas ya estará de camino hacia su nuevo hogar, donde, suponemos, permanecerá guardada a buen recaudo hasta convertirse en una pieza de colección muy codiciada.