LA ROTONDA,

VIVIR PARA VER

Es indudable que nos llevamos todos el día visualizando nuestro teléfono móvil ─entre otros calificativos─, ya que seguramente lo que menos hacemos con él es realizar llamadas o recibirlas, tanto es así, que los utilizamos para hacer fotos, copiar documentos, escuchar música y tantas y tantas funciones que podríamos dedicarle más de un artículo a este instrumento de comunicación de finales del siglo XX.

Tablet, portátiles, navegadores del automóvil, e incluso son muchos los que ya utilizamos los libros electrónicos por lo que nuestra visión ejerce una labor muy superior de fijación a la que realizábamos antes de que existieran estos inventos ─para algunos imprescindibles─, sin duda, no solo a efectos personales, sino también muy útiles en el mundo laboral de hoy día.

Esto viene a cuento, porque hoy quiero hacer una reflexión en voz alta de lo poco que cuidamos nuestra visión, sobre todo los conductores, ya sean privados o profesionales. Me consta que para la renovación de los permisos hay que hacer una serie de pruebas, en las que se incluye un examen oftalmológico, que, si no ha cambiado, consiste en que tapándonos un ojo y otro después veamos a una distancia determinada una serie de símbolos o letras correctamente. Si en los últimos cuatro años no ha cambiado, esta prueba nos sobra y nos basta para renovar entre otras pruebas, que no tienen nada que ver con la oftalmología nuestro permiso de conducir, “doctores tiene la iglesia”, ellos sabrán si este tipo de reconocimiento es suficiente para que podamos durante un cierto tiempo conducir un vehículo automóvil.

¿Se han fijado alguna vez, cómo algunos conductores manejan el volante de una forma muy especial, incluso con sus rostros por encima del volante? Suele ocurrir en personas de mayor edad, aunque no pongo en duda que han pasado con nota su revisión para renovar el carnet. ¿Cuántas veces han oído a un conductor decir, lo siento, pero no lo he visto? No hace falta que se haya distraído, o fuese hablando por el móvil, sencillamente es que tenía problemas de visión y ocurrió lo que tenía que ocurrir.

El sentido de la vista nos proporciona el 90% de la información que necesitamos para conducir. Por tanto, es importante acudir a revisiones oftalmológicas periódicamente y estar al tanto ante el mínimo indicio de que estamos perdiendo visión.

Durante la conducción el sentido de la vista es el más importante ya que se ve obligado a adaptarse rápidamente a un entorno cambiante debido a las diferentes velocidades a las que conducimos.

Las estadísticas indican que 1 de cada 3 personas podría ver mejor, pero lo desconoce. Y que 1 de cada 20 ve muy mal y también lo ignora.

A pesar de estos datos, el 25,7% de los españoles de entre 18 y 30 años nunca se han sometido a un examen visual.

Cualquier problema ocular o enfermedad provoca una visión de peor calidad y multiplica el riesgo de sufrir cualquier tipo de percance en la carretera, ya que en esas circunstancias resulta más difícil calcular distancias o conducir en situaciones adversas.

Por último, nos gustaría recordar que, en condiciones atmosféricas adversas como lluvia o niebla, no solo se reduce la visión, sino que la luz de los faros se refleja en el agua y crea una sensación de espejo que puede ser muy peligrosa

Después de lo expuesto creo que deberíamos darle más importancia a nuestra visión, si queremos ponernos delante de un volante, POR NUESTRA SEGURIDAD Y LA DE LOS DEMÁS.

Ya lo sé, tantas normas, tantas revisiones, pero si no queremos perder la vida en la carretera, tenemos que darnos cuenta que conducir no es un juego, y si nuestro vehículo o nosotros mismos no somos aptos para conducir, mejor que no lo hagamos, así de sencillo. Lo mismo, con visitar a un oftalmólogo o a nuestro optometrista del barrio, encontramos la solución, unas gafas que nos permitan mejorar nuestra visión pueden solucionar un problema más sencillo y evitar a la larga otro de mayor importancia.

 De tal forma, a aquellos que corresponda, conductores y profesionales, así como a las distintas instituciones implicadas en el asunto, sean más rigurosos con este tema, podemos evitar un ACCIDENTE entre todos.

Con respeto y afecto,

Pepe Bejarano

todomotorsevilla@gmail.com