Hace apenas una semana saltó la
noticia de que el Ateca se había convertido en un arma de doble filo para Seat,
pues tanto ha sido su encanto que la firma española se ha visto obligada a
retirar del mercado durante un periodo de tiempo indeterminado las cuatro
versiones del SUV que se equipan con motor TDI 2.0 de 150 CV para evitar que se
realicen más pedidos y poder así cumplir con una producción que abastezca una
demanda que ha terminado por ser "más grande de lo que pueden
abarcar".
El problema de este retraso en la
producción es que muchos de sus clientes ya habían realizado la reserva, con su
correspondiente pago de señal, y ahora se han quedado sin vehículo y sin
dinero. Por ello, Seat ha decidido compensar a los clientes afectados
permitiéndoles adquirir un modelo superior o con un equipamiento más caro a
coste cero.
En el caso de aquellas personas que
compraron un Seat Ateca 2.0 TDI 150 CV con tracción delantera y cambio manual,
la firma les ofrece el mismo modelo, pero con tracción total 4Drive. Una
modificación en la mecánica que supone incluir también el Seat Drive Profile,
para configurar el modo de conducción, y que se traduce en una contrapartida
total de 2.760 euros si se coge como base la lista oficial de precios de Seat.
Asimismo, los clientes que
solicitaron un Seat Ateca 2.0 TDI 150 CV con transmisión automática de doble
embrague DSG podrán optar a la versión diésel con 190 CV de potencia, misma
transmisión y tracción total, lo que supone un coste adicional respecto al
retirado de 6.500 euros que también pagará Seat.
Un éxito que, contra todos los
pronósticos, le va a salir bastante caro a Seat. Y es que según informa
Autopista, las unidades que han dejado de producirse ascienden hasta las 900,
de las cuales en torno a 600 serían las versiones de cambio manual y las 300
restantes las de cambio automático.
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