Mitsubishi
Motors falseó los datos de consumo energético en ocho modelos más de los que
reconoció inicialmente, según anunció ayer el Ejecutivo japonés tras realizar
una investigación independiente.
La
empresa nipona admitió el pasado abril que había manipulado los datos de
consumo de combustible para cuatro modelos de minivehículos (con motores de
menos de 660 centímetros cúbicos), entre ellos dos fabricados por Mitsubishi y
comercializados por Nissan. Los cuatro fueron vendidos bajo una falsa garantía
que aseguraba que eran entre un 5 y un 15% más eficientes de lo que en realidad
son.
Posteriormente,
la investigación interna llevada a cabo por la compañía reveló que la
manipulación podría extenderse a un número mayor de modelos vendidos únicamente
en Japón, sin precisar cuáles. Fue entonces cuando el Gobierno nipón decidió
llevar a cabo una investigación independiente y ha hallado que los catálogos de
otros ocho modelos de la empresa mostraban datos de consumo de combustible
mejores que los reales.
El sexto
fabricante nipón de automóviles tiene previsto suspender las ventas de todos
los modelos afectados y remitir los datos corregidos de consumo energético al
fabricante, anunció por su parte un responsable de la compañía en su
comparecencia ante los medios. Tras desvelarse el escándalo, el fabricante
detuvo la producción de los cuatro modelos inicialmente afectados (el ek Wagon,
el ek Space, el Dayz y el Dayz Roox, estos dos últimos comercializados por
Nissan) hasta el pasado 4 de julio, con el consiguiente impacto en sus ventas.
Además, prevé abonar compensaciones a los propietarios de los coches por valor
de al menos 545 millones de euros este año y en total prevé una pérdida neta
para el actual ejercicio en torno a 1.200 millones.
El
escándalo ha supuesto un nuevo golpe para la industria de la automoción después
del caso de la alemana Volkswagen.
Fuente: Ecomotor.es
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