• La fábrica de Torslanda se prepara ahora para producir el
nuevo XC90
El pasado viernes 11 de
julio marcó el final de una era en Volvo Cars, ya que la producción en Suecia
del icónico XC90 —un vehículo que revolucionó completamente el sector de los
SUV— llegó a su fin después de 12 años de éxito.
La historia comenzó el 7 de
enero de 2002, cuando Volvo Car Corporation presentó en el Salón del Automóvil
de Detroit un nuevo modelo que se esperaba con impaciencia. Se trataba de un
vehículo que los concesionarios y los clientes, sobre todo de América, habían
estado esperando con ansia: el Volvo XC90
Un vehículo que recibiría
más de 100 premios internacionales, incluido el de «SUV del año» ya en 2003, y
que fue declarado el producto para la exportación más valioso de Suecia, con
exportaciones superiores a los 40.000 millones de coronas anuales en los años
de mayor esplendor. Antes de que las ventas comenzaran en 2003, los
concesionarios Volvo ya habían recibido 15.000 pedidos.
636.143 unidades del Volvo
XC90
Pero todo llega a su fin.
Después de producir 636.143 unidades del XC90, toda una leyenda del sector del
automóvil acaba de cesar su producción en Torslanda para dejar paso al XC90 de
la siguiente generación. El último XC90 fabricado en Gotemburgo saldrá
directamente hacia el Volvo Museum, situado en esta misma ciudad. Sin embargo,
la producción del actual XC90 continuará en la nueva fábrica de Volvo en Daqing
a partir de finales del año bajo el nombre de Volvo XC Classic, un modelo que
solo se venderá en China.
El nuevo Volvo XC90 también
se fabricará en las instalaciones de Torslanda. El vehículo, que se presentará
en agosto, comenzará a producirse a finales de enero de 2015.
Hans-Olov Olsson, actual
vicepresidente de Volvo Car Corporation, era el responsable de ventas en EE.
UU. a finales de la década de 1990. En 1998 consiguió convencer al entonces CEO
de la compañía, Tuve Johannesson, de que la empresa debería invertir en un SUV.
En agosto de 1998 se encargó
al director de proyectos de Volvo Cars, Hans Wikman, que desarrollara una
propuesta para un SUV moderno de 7 plazas que no fuera demasiado grande. El
proyecto, que se denominó «P28», estaba basado en la misma plataforma que el
Volvo S80 y debía presentarse en 2002. El objetivo de vender 50 000 unidades al
año fue claramente superado: durante los años 2004-2007, los de mayor éxito, se
vendieron unos 85 000 vehículos cada año. Estados Unidos ha sido el mayor
mercado individual para el XC90, con cifras récord en 2004 (38 800 unidades) y
2005 (36 200).
Al mismo tiempo que se
preparaban tres propuestas de diseño —dos en California y una en Gotemburgo— se
reunió en California un grupo de referencia formado por mujeres, entre ellas la
actriz sueca Maud Adams, para que aportaran sus deseos y comentarios, ya que la
mujer americana era una parte importante del grupo objetivo previsto.
41°C en el desierto
El 4 de mayo de 1999 fue un
día importante para el proyecto. Bajo temperaturas de hasta 41°C, las tres
propuestas de diseño fueron presentadas en la pista de pruebas de Volvo Cars a
las afueras de Phoenix, Arizona. Los altos directivos y algunos miembros de la
futura dirección del proyecto asistieron al acto con el objetivo de llegar a un
acuerdo sobre el diseño. La propuesta exterior ganadora fue la diseñada por
Doug Frasher, del VMCC (Volvo's Concept & Monitoring Center) de California,
quien también había diseñado el exterior del Volvo S80.
Hans Wikman recuerda lo que
sintió mientras el equipo directivo examinaba las tres alternativas bajo el sol
abrasador del desierto:
«Todos los miembros del
equipo del proyecto estábamos un poco tensos. Después de todo, el programa SUV
ya se había aparcado antes un par de veces. Teníamos los dedos cruzados para
que el diseño y el contenido que habíamos planificado fueran lo bastante buenos
como para que la dirección los aprobara sin reservas. Y eso es exactamente lo
que ocurrió».
Un importante impulso para
el segmento de los SUV
Hubo muchas críticas, en el
sentido de que Volvo Car Corporation había entrado en el segmento de los SUV
demasiado tarde (en el año 2002). Sin embargo, el XC90 dio un importante impulso
a todo el segmento al resolver muchos de los problemas que presentaban los SUV
anteriores.
«Utilizábamos la hipótesis
de trabajo La siguiente generación de SUV», explica Hans Wikman. «En otras
palabras, en el XC90 íbamos a presentar soluciones innovadoras para eliminar
los inconvenientes que caracterizaban a los SUV de aquel momento».
Estas soluciones eran:
• La posibilidad de crear un suelo de carga plano debajo de los
asientos delanteros.
• Unas propiedades de conducción equivalentes a las de un
vehículo normal.
• Una economía de combustible líder del segmento.
Cinco innovaciones
fundamentales
Cuando se presentó en 2002,
el Volvo XC90 presentaba cinco innovaciones fundamentales:
• RSC (Control de estabilidad contra vuelcos), un sistema que
utiliza un sensor giroscópico para detectar y contrarrestar el riesgo de
volcar, y ROPS (Sistema de protección contra vuelcos), que optimiza la
protección de todos los pasajeros en el caso de que, a pesar de todo, se
produzca un vuelco.
• Airbags de techo lateral en las tres filas de asientos.
• Un asiento de seguridad infantil integrado ajustable para los
niños que viajan en la segunda fila de asientos.
• Cinturones de seguridad con «pretensores» en todos los
asientos.
• Un larguero transversal más bajo en la parte delantera con la
misión de activar los sistemas de seguridad del vehículo en caso de colisión.
Más de una década después,
el IIHS (American Insurance Institute for Highway Safety) sigue considerando al
XC90 como uno de los vehículos más seguros del mercado y le ha otorgado el
título Top Safety Pick+ 2014.
El Volvo XC90 se presentó
con una gama de motores de cinco y seis cilindros, todos ellos montados
transversalmente de acuerdo con el concepto de motorización de Volvo. En 2004,
la gama se amplió con un potente motor V8 transversal de aluminio combinado con
una caja de cambios automática de seis velocidades.
«Hemos aprendido muchísimo
del XC90 de primera generación»
Ahora el XC90 de primera
generación dejará paso a su sucesor, un vehículo en el que se han introducido
al menos tantos avances de desarrollo y contenido como en el primero.
«Estoy convencido de que
nuestros clientes estarán muy satisfechos», comenta Dennis Nobelius, responsable
del nuevo XC90. «Hemos aprendido muchísimo acerca del importante planteamiento
holístico para todos los pasajeros del vehículo y eso nos permitirá seguir
teniendo el mismo éxito».
«Nuestro nuevo XC90 no es
solo una evolución natural de un vehículo que ha tenido un éxito increíble:
también es un excelente ejemplo de la transformación de Volvo Cars, tanto desde
el punto de vista de la empresa como desde la perspectiva de la marca», declara
Lex Kerssemakers, vicepresidente primero de Product Strategy & Vehicle Line
Management de Volvo Cars. «Esperamos que este sea el comienzo de una nueva era
de éxitos».
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