El
fabricante británico de vehículos Jaguar Land Rover ha confirmado su compromiso
con sus instalaciones y con sus inversiones en Reino Unido y con los clientes
de la Unión Europea, después de la votación a favor por parte de los ciudadanos
británicos de la salida de la UE.
En un
comunicado, Jaguar Land Rover aseguró ser una compañía británica, con una
fuerte base industrial en el país. "Llamamos hogar a Reino Unido y
seguimos comprometidos con todas nuestras instalaciones industriales y con las
decisiones de inversión", subrayó.
Al mismo
tiempo, la compañía explicó que Europa es un "mercado estratégico
clave" para su negocio, ya que representa el 20% de sus ventas mundiales,
por lo que también manifestó su compromiso con los clientes de la Unión
Europea.
"Respetamos
las opiniones de los ciudadanos británicos y, en línea con todas las demás
empresas, Jaguar Land Rover gestionará el impacto a largo plazo y las
implicaciones de esa decisión: nada cambiará para nosotros o para la industria
de la automoción de la noche a la mañana", añadió.
La firma
destacó que ahora se abre un significativo período de negociación, en el que
trabajarán con el Gobierno británico y con el sector del automóvil para
asegurar que la industria automovilística instalada en el país mantiene su
competitividad.
Además,
apuntó que las negociaciones entre el Ejecutivo británico y la Unión Europea
continuarán reconociendo la importancia de la fabricación de coches tanto para
Reino Unido como para las economías europeas.
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