EL PESCADOR
El pescador vivía en una pequeña casa de paredes blancas,
ubicada en una bella población costera. Tenía esposa y tres hijos. Después de
una larga temporada en altamar, su mayor felicidad era la compañía de su
familia. Su esposa, una mujer de pelo castaño, ojos azules y labios carnosos; y
él, un varón de rasgos varoniles, tez morena y cabello espeso, rondaban los
cuarenta años; y la edad de sus hijos oscilaba entre los cinco años de la hija
pequeña que guardaba un gran parecido con su madre y los quince años del hijo
mayor, un espigado adolescente. El hijo mediano tenía doce años, era el más
vivaracho de los tres descendientes y el que más se parecía a su padre, en el
aspecto físico y en su manera de ser.