LA ROTONDA

 

ACOSO EN EL DEPORTE

El acoso y abuso sexual en el deporte es un problema grave que afecta a personas en todas las edades, géneros y niveles de competencia. Implica comportamientos no deseados de naturaleza sexual que crean un ambiente hostil, intimidante o humillante para la víctima. Esto puede ocurrir en diferentes contextos deportivos, como equipos, clubes, competiciones y hasta en la relación entre entrenadores y atletas. El acoso y abuso sexual pueden tener consecuencias devastadoras para las víctimas, tanto a nivel físico como emocional.

 Algunas formas de comportamiento de acoso y abuso sexual en el deporte pueden incluir:

Comentarios inapropiados: Comentarios con connotaciones sexuales o insinuaciones hacia los atletas.

Contacto físico no deseado: Toques inapropiados, abrazos no deseados o cualquier tipo de contacto físico invasivo.

Intimidación sexual: Utilización del poder o la posición para presionar a alguien para que participe en conductas sexuales no deseadas.

Chistes o imágenes sexuales: Compartir chistes, imágenes o contenido sexualmente explícito en el entorno deportivo.

Coerción sexual: Forzar a alguien a participar en actividades sexuales en contra de su voluntad.

Comentarios humillantes: Burlarse o avergonzar a alguien en función de su género o apariencia.

Difusión no autorizada de imágenes íntimas: Compartir imágenes personales sin el consentimiento de la persona, también conocido como "porno vengativo".

Para abordar este problema, es esencial crear un entorno deportivo seguro y respetuoso para todos. Algunas medidas para prevenir y combatir el acoso y abuso sexual en el deporte incluyen:

 

Políticas y códigos de conducta: Establecer políticas claras que prohíban el acoso y abuso sexual, y comunicarlas de manera efectiva a todos los miembros del equipo o club.

Entrenamiento y educación: Proporcionar capacitación sobre acoso y abuso sexual a entrenadores, atletas y personal deportivo para que puedan reconocer y prevenir estas conductas.

Canales de denuncia seguros: Establecer un sistema de denuncia confidencial y seguro para que las víctimas puedan informar sobre incidentes sin temor a represalias.

Investigación imparcial: Realizar investigaciones exhaustivas y imparciales cuando se presenten denuncias, garantizando que se tomen medidas adecuadas si se confirma el comportamiento inapropiado.

Apoyo a las víctimas: Proporcionar apoyo emocional y recursos a las víctimas para ayudarles a sobrellevar la situación y buscar ayuda profesional si es necesario.

Responsabilidad: Hacer que los responsables de comportamientos de acoso y abuso sexual enfrenten consecuencias apropiadas, que pueden incluir sanciones disciplinarias o legales.

Hoy he querido traer este tema que tanto ha dado que hablar con motivo de la consecución de la Selección Española de Fútbol femenina del Mundial, y lo lamentable es que se ha hablado más de este asunto que del triunfo de España como campeona del mundo. En resumen, el acoso y abuso sexual en el deporte es un problema serio que requiere la atención y acción de todas las partes involucradas en el mundo deportivo. La creación de un ambiente seguro, respetuoso y equitativo es fundamental para garantizar que todos los atletas puedan participar y prosperar sin temor a la intimidación o el abuso.

 

Con afectoy respeto,

 

Pepe Bejarano

todomotornews@gmail.com