Retrovisores digitales y con
los que pagar en un peaje, volantes que alternan el frío y el calor para evitar
un accidente por distracción o cámaras que acaban con los ángulos muertos son
algunas de las últimas innovaciones que están llegando a nuestros automóviles
para facilitarnos el día a día.
Detrás de algunas de ellas
está la multinacional española Ficosa que, desde Barcelona, ha desarrollado
unas cámaras que sustituyen a los retrovisores exteriores.
Donde deberían ir situados
estos dos espejos, se ha colocado una cámara en cada lateral del vehículo que
proyecta las imágenes que graba al interior, a sendos monitores ubicados en la
parte alta de las puertas delanteras.
El primer vehículo que los ha
montado es el eléctrico Audi e-tron (desde 82.460 euros) y, según la marca, el
conductor tarda unas 48 horas en acostumbrarse definitivamente a estos
retrovisores digitales. Honda también ha anunciado que los equipará en su nuevo
vehículo eléctrico Honda e.
Nosotros ya los hemos probado.
La adaptación es fácil y la visiblidad con lluvia o por la noche es mucho mejor
que en unos tradicionales. El precio de los Audi Virtual Mirrors es de 1.810
euros
Con el espejo retrovisor se
puede pagar en Japón en los peajes
Ficosa, junto con Panasonic,
también es la responsable de que BMW haya incorporado al X5 que vende en Japón
un sistema de pago en el retrovisor interior para poder abonar un peaje u otros
servicios. En una pequeña pantalla en la parte superior se informa de la
cantidad a abonar.
Por su parte, el Grupo
automovilístico británico Jaguar Land Rover ha desarrollado, en colaboración
con la universidad escocesa de Glasgow, un volante que mediante cambios
térmicos (frío/calor) ayuda a los conductores a mantener la vista en la
carretera.
Este "volante
sensorial" cuenta con zonas que pueden calentarse o enfriarse rápidamente
-con una diferencia de 6ºC- para seguir las instrucciones del navegador (giros
a izquierda o derecha), lo que, para la marca, es muy útil cuando la
visibilidad sea reducida por las condiciones meteorológicas o el trazado de la
carretera.
Común a las innovaciones
citadas es la seguridad en la carretera tanto para el ocupante como para el
resto de vehículos.
Volvo se ha fijado para 2020
que nadie muera en un accidente en el que esté implicado alguno de sus nuevos
vehículos
De esto sabe mucho Volvo Cars que se ha fijado
para 2020 que nadie muera o resulte grave en un Volvo nuevo en un accidente de
tráfico.
Para ello, ha identificado que
los tres principales factores que influyen en la conducción son la velocidad
excesiva, el consumo de alcohol y drogas, y las distracciones.
En cuanto a la velocidad ha
decidido que en 2020 limitará a 180 km/h la velocidad máxima de todos sus
vehículos. En esa fecha también quiere incorporar cámaras y sensores en el
interior para evitar que los conductores que hayan ingerido alcohol o drogas
puedan circular.
Para 2021 llegará la llave
digital Care Key que permitirá fijar una velocidad máxima para personas a las
que el propietario les preste su vehículo.
Entretanto, Hyundai en su SUV
de hidrógeno Nexo y en el Santa Fe ha incorporado cámaras que muestran en el
cuadro de instrumentos la visión lateral de los ángulos muertos.
Lo que está por llegar son
cajas negras, carga por inducción de los eléctricos o experiencias inmersivas
¿Y qué esta por llegar? Según
ha explicado a Efe el Chief Sales Officer de Ficosa, Ignasí Castelló, las
innovaciones se centrarán en tres campos: seguridad, electrificación y
conectividad.
Su implantación dependerá del
coste que le suponga al fabricante, ya que de lo que se trata es de montar
cajas negras (para conocer el estado del vehículo antes de un accidente),
sistemas de realidad aumentada para proyectar informaciones como la dirección a
tomar, monitores repartidos por la cabina para evitar la fatiga al volante
(ahora avisan cuando ya han cerrado los ojos y la idea es que lo hagan entre 1
y 5 minutos antes) y distracciones, así como para conocer la respiración y la
frecuencia cardíaca de los ocupantes, con lo que se puede evitar dejar a
menores en el interior o conocer el estado de un herido tras un accidente.
En electrificación, la
tendencia es a la carga inductiva (sin cables) de los vehículos; mientras que
en conectividad la llegada del 5G posibilitará mejorar la precisión de los GPS
o que pueden comunicarse los vehículos entre sí, con las personas y con las
infraestructuras que les rodean.
Pantallas envolventes en los
coches autónomos harán que sus ocupantes disfruten de experiencias inmersivas
desconocidas hasta el momento. En ello
están Intel y Warner Bross, entre otras.
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