En 2017 los consumidores mundiales
mantendrán la carrera por reducir las emisiones, según IFS. Las ventas de
vehículos alternativos a los coches de gasolina doblarán sus ventas, alcanzando
un 20% del total de las ventas de 2017, en comparación con el 10% de 2015.
Y el grueso de estas nuevas ventas
se producirán en China, que continuará acaparando el mercado de la producción
de vehículos eléctricos a gran escala, mientras Europa y los Estados Unidos se
quedan atrás.
La consultora, por otra parte,
prevé que también los millennials y las siguientes generaciones de conductores
tenderán cada vez más, a los largos alquileres y el uso compartido de coches en
lugar de a comprar su propio vehículo. Además, para estos nuevos consumidores
las capacidades digitales serán un diferenciador fundamental, por lo que
tendrán en cuenta a qué servicios, redes y datos pueden acceder, o la capacidad
del vehículo para conectarse.
“Para los fabricantes y proveedores
del sector de la automoción vienen nuevas direcciones, nuevos procesos de
producción, nuevas capacidades y nuevas estrategias, y es esencial que se
adapten a los cambios cuanto antes”, concluye Steffan Issing, director mundial
del sector automoción de IFS.
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