El Juzgado de Primera Instancia
número 22 de Palma de Mallorca ha fallado a favor de un cliente que demandó a
Volkswagen por el dieselgate.
La sentencia, que data del pasado 9
de diciembre, obliga al concesionario Amcars de Seat de Palma de Mallorca a
pagar 500 euros al damnificado, y se convierte así en la segunda que dicta contra
el fabricante alemán en España tras la del pasado mes de octubre en Valladolid.
El afectado es propietario de un
Seat Ibiza 1.6 TDI que equipaba el software que manipula las emisiones
contaminantes cuando detecta que el vehículo está siendo sometido a fase de
pruebas.
Según informa el diario El Mundo,
en este caso, la Justicia considera que "el proceder cuanto menos
negligente del fabricante ha dado pie a que la demandante padezca esa desazón,
esas molestias y esa zozobra a las que se ha hecho referencia y por ello está
obligada a indemnizarla en la misma medida que la vendedora y solidariamente
con ella". Si bien, no se aplicará la "resolución del contrato"
ni una compensación mayor puesto que la marca ha ofrecido al cliente la
reparación sin costes en menos de media hora.
La firma ya cuenta con la
autorización pertinente de la autoridad alemana KBA para dar soluciones
técnicas al motor EA 189 TDI de cuatro cilindros 1.6 litros, lo que supone una
actualización del software, así como la instalación de un tubo. Las operaciones
de reparación requerirán menos de una hora de trabajo en los talleres.
Según la compañía, esta
modificación técnica no provoca cambios en los consumos de combustible, ni en
las prestaciones o en los niveles de ruido de los vehículos y subrayó que, una
vez realizada, los modelos cumplirán con las exigencias y con las normativas
medioambientales.
Volkswagen ha perdido dos pleitos
por el momento, no obstante, la Justicia española ha fallado a su favor en un
gran número de sentencias como, por ejemplo, los casos de Valencia, Cantabria o
Zaragoza.
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