Todo lo que está relacionado
con el automóvil clásico se está poniendo de moda y en valor, incluso los mapas
y guías de carretera que empezaron a utilizar los primeros conductores a principios
del siglo pasado.
Verdaderos navegadores de aquella
época, las guías aportaban toda la información necesaria para aventurarse sobre
las carreteras y las pistas de los cinco continentes, muchas de ellas aún sin
transitar por los vehículos a motor.
Pionera en editar estas completísimas
obras para el viajero, la empresa de neumáticos Michelin hizo imprescindible
desde 1900 llevar en la guantera su famosa guía. No solamente incluía la
cartografía del país, sino también muchas informaciones útiles para conocer la
situación de los imprescindibles talleres de reparación, estafetas de correos,
farmacias, médicos locales, puntos de interés turístico, lugares donde
avituallarse o pernoctar en ruta. Sin olvidar su famosísima calificación por
estrellas de los mejores restaurantes donde hacer las paradas gastronómicas.
Utilizada en el desembarco de
Normandía
Pues bien, una colección completa
de guías Michelin desde su aparición hasta nuestros días ha sido vendida
recientemente por 26.000 euros en Royat (Francia). Y otra colección completa ha
sido tasada en nada menos que 25.000 euros como precio de salida para salir el
próximo mes de diciembre a subasta del mejor postor en la galería británica
Christies. En la colección de tomos, uno por cada año, solamente faltan los
correspondientes a las dos Guerras Mundiales, periodos en los que no pudieron
ser editadas.
Hasta 1920 no apareció una
cartografía detallada donde se indicaban las primeras carreteras asfaltadas.
Durante las diversas guerras de la historia reciente e incluso en nuestros días,
la cartografía Michelin es la utilizada en África por su detallismo,
registrando desde las pistas recorridas por los beduinos del desierto hasta los
pozos de agua o los antiguos aeropuertos militares de laterita, abandonados en
medio de la nada. En 1939, el ejército norteamericano editó la guía de aquel
año para orientar a sus soldados sobre suelo francés en su avance tras el
desembarco.
Ya existe una Convención de
coleccionistas de guías Michelin que se reúne, intercambia y busca ejemplares
perdidos. No es de extrañar que el interés por estas publicaciones históricas
se haya activado a nivel internacional puesto que una colección completa,
dependiendo de su estado, ya se valora entre 20.000 y 32.000 euros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Solo comentarios relacionados con la información de la página.