El fabricante de automóviles Ford ha iniciado
una campaña de revisión que afectará a 11.500 unidades del Escape en Estados
Unidos a causa de un eventual defecto en los conductos del combustible, informó
la compañía en un comunicado.
Ford explicó que esta acción afecta a las
unidades del modelo Escape fabricadas el pasado 11 de julio y que montan el motor
de 1.6 litros de gasolina. La firma resaltó que las unidades equipadas con los
propulsores de 2.0 y 2.5 litros no están incluidas en esta iniciativa.
La corporación del rombo aseguró que esta
llamada a revisión se produce para sustituir o reparar un compartimiento del
depósito de combustible que puede experimentar pérdidas de carburante, lo que
podría generar un incendio en el vehículo.
La multinacional estadounidense destacó que
este fallo no ha ocasionado lesiones a sus clientes y subrayó que únicamente
incumbe a las unidades con el motor de 1.6 litros fabricadas el pasado 11 de
julio.
Como medida adicional, la empresa ha informado
a los propietarios de una unidad del modelo Escape con el motor de 1.6 litros
de gasolina, pero que se fabricaran en otro día, que contacten con sus
concesionarios como medida de precaución.
El director asistente de la Oficina de
Seguridad de Ford, Ray Nevi, indicó que la compañía ha identificado un problema
y han llevado acciones rápidamente para lograr el mejor interés de sus
clientes.
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