PALABRAS INNECESARIAS
El sencillo salón de actos está preparado para la conferencia-coloquio
sobre el coche eléctrico, con las medidas sanitarias requeridas por la
situación. Se abren las puertas y los asistentes provistos de mascarillas,
después del control de la temperatura y la desinfección de las manos con el
gel, van ocupando ordenadamente las butacas asignadas… Una localidad vacía
entre cada dos personas. Son asientos plegables de color azul oscuro. Las luces
de bajo consumo proporcionan un ambiente confortable. En el estrado un hombre
de unos cuarenta años, con traje gris marengo y una corbata roja, repasa un
catálogo portando unas gafas correctoras de su evidente presbicia. Junto a él,
una mujer de la misma edad, con un traje rojo y una larga melena de color
castaño, coloca panfletos en una pequeña mesa. Cuando el público está ubicado,
los dos conferenciantes toman asiento en sendas sillas… Se oye la voz cavernosa
del hombre de sienes nevadas y rostro orondo: