

El
desarrollo de este vehículo deportivo se ha basado en un concepto integral de
construcción ligera, lo que ha permitido reducir el peso total del automóvil
hasta los 1.485 kilogramos, a pesar de contar con un sistema de propulsión
híbrido enchufable. Esta cifra se ha logrado gracias a la utilización de
materiales ligeros como la fibra de carbono o los plásticos reforzados.