LA ROTONDA

OTRA VEZ SERÁ

Atrás quedaron los sones cofrades de una primavera de luto, atrás en la memoria del tiempo quedaron el bacalao en todas sus modalidades de una cuaresma que hemos tenido que vivir a golpes de COVID-19. Un día y otro de confinamiento, queremos ver el final. Son muchos días. Pero todo sea porque le ganemos la batalla a esta plaga histórica que nos ha doblegado la salud y la economía. Pero la primavera sigue aquí.

Hoy deberían de encenderse más de trescientas mil bombillas que abrirían la puerta a una de las ciudades más efímeras del mundo. LA FERIA DE ABRIL DE SEVILLA.

El cante y baile por sevillanas, sonarán como sonaron en Semana Santa las marchas procesionales. Y es que aquí en el Sur, nos encanta vivir de dentro para fuera, nos gusta poner en el escaparate todas nuestras tradiciones, nos gusta vivir y beber ─con moderación─, pero, sobre todo, nos gusta compartir con todo el mundo aquello que nos identifica. Hoy, como en Semana Santa, viviremos una primavera de fuera para adentro: Confinados y en casa, escucharemos las sevillanas de siempre, la tortilla de patatas, la chacina y el rebujito nos lo tomaremos a sorbos muy pequeños, solo para brindar por todos aquellos que se han quedado en el camino, y todos aquellos que lloran por sus familiares que se han ido en la más íntima soledad. Pero, también, brindaremos en esta Feria sin albero, sin caballos y sin color, por todas aquellas personas que han luchado y siguen luchando en la primera línea de las trincheras contra el mal: sanitarios, policías, transportistas, agricultores; todas aquellas personas que han puesto sus vidas al servicio de los demás. Levanto mi catavino por todos ellos, por su vocación de servicio, por enfermar y morir, dar su vida por los demás y conformar esa línea de vanguardia que hace que todos los demás vivamos con mayor seguridad.

Hoy, en Sevilla, sonarán sevillanas, y en cada balcón no faltarán aquellos que, al no poder salir de casa, no podrán volverse locos con el coche, la moto, o cualquier vehículo que utilicen con una copa de más. Un motivo  más para aplaudir, pero esta vez los aplausos se convertirán en palmas por sevillanas, y si no, agudicen el oído, al compás de tres por cuatro, desde la baranda de la terraza, escucharemos a: Los Romeros de la Puebla, Paco Palacios “El Pali” o Cantores de Híspalis,  hoy Sevilla vivirá la Feria más grande de su historia porque toda Sevilla será una feria de solidaridad y tolerancia, hoy el color alegre de la primavera se ha convertido en blanco y negro. Hoy, “La calle del infierno” es por la que todas las familias afectadas transitan con la esperanza de la salud, y porque puedan vivir y sentir nuevas primaveras en compañía de toda su familia, y que ninguno se haya quedado en el camino.

Hoy cuando vayas o vengas de trabajar, cuando hayas cumplido con tu obligación laboral, en la radio de tu coche, sonará a lo mejor este estribillo del grupo Brumas:

“Feria de abril en Sevilla
Quién se la puede perder
Es noche de manzanilla
De abanico y mantillas
y de flores de papel”

Hoy en Sevilla, no habrá portada de Feria, ni dejaremos nuestros vehículos en casa y utilizaremos el Bus especial de feria, no, hoy no cruzaremos la portada encendida de la feria, ni compartiremos el “pescaíto frito” con nuestros amigos y familiares, la feria tal y como la conocemos, la ciudad de la alegría, hoy será la ciudad de la tristeza después de tanto y tantos años, y eso nunca es bueno.

Pero les aseguro que la primavera volverá, que el olor del azahar nos invadirá a todos, y que las Hermandades cofrades, pondrán sus imágenes en la calle para hacer sus estaciones de penitencia y, que cuando llegue un día como el de hoy, la luz volverá a brillar como nunca, y entonaremos el principio de esa letra de las sevillanas que decían: “Feria, feria de abril, la gente se emborracha de alegría”.

Y es que esta tierra, donde la luz amolda el carácter de sus gentes, hace que, durante esta estación del año, la alegría sea el denominador de sus gentes y de sus pueblos y tradiciones.

Hoy me perdonarán la licencia que me he tomado de redirigir un artículo donde el volante de mi conciencia me ha llevado, dada las circunstancias, a aparcar las cuatro ruedas de mi coche, justo al lado de una calle donde la realidad reclama mi reflexión en voz alta sobre un asunto que nos tiene a todos al revés. Habrá muchas más semanas para que volvamos al terreno que nos ocupa, aquel que hace que nos pongamos el mono de trabajo y nos detengamos de nuevo en cifras de ventas imposibles, en un deterioro del tejido productivo del sector, y en las novedades de las marcas que son como el sueño que con mucho interés y trabajo nos presentan cada año para hacernos más fácil la vida a todos. Pero de eso hablaremos otro día, hoy es el primer día virtual de la FERIA DE SEVILLA. ¡VIVA LA FERIA DE ABRIL! aunque la celebremos en septiembre, o el próximo año.

Con afecto y respeto,

Pepe Bejarano

todomotorsevilla@gmail.com