VIII
EDICIÓN DEL LIBRO BLANCO DE VO DE GANVAM
El 75% de las operaciones
entre particulares se hace por Internet, frente al 28% de hace dos años
En un momento en el que las
administraciones persiguen el uso del coche privado para reducir la
contaminación, promoviendo la conducción compartida como solución de movilidad
más eficiente, los españoles lo tienen claro: no están dispuestos a renunciar a
la libertad que les proporciona su vehículo. Tanto es así que un 69% apuesta
por la compra de un VO como alternativa al pago por uso del carsharing, según
las conclusiones de la última edición del Libro Blanco del VO de Ganvam.
Este informe –que fotografía
la percepción del usuario del mercado de ocasión a través de la opinión de más
de 700 compradores y potenciales compradores- pone de manifiesto cómo estas
nuevas fórmulas de movilidad pueden ser un complemento al coche en propiedad,
pero no un sustitutivo por mucho que supongan el ahorro de los gastos de
mantenimiento, seguro o aparcamiento. De hecho, ocho de cada diez reconoce que
la existencia de soluciones de conducción compartida no influye en absoluto en
su decisión de compra.
De esta forma, cuando se
trata de buscar solución de movilidad el precio deja de ser el factor absoluto
para dar entrada a otras prioridades relacionadas no sólo con el confort sino
también con la seguridad, prueba de ello es que ha crecido de un 15% a un 25%
el porcentaje de compradores de VO predispuestos a pagar un poco más a un
vendedor profesional a cambio de un vehículo que incluya un buen equipamiento y
pueda garantizar su buen estado.
Esto significa que los que
en su día se movieron exclusivamente a precio parecen haber sacado en claro que
lo barato puede salir caro, sobre todo, al mirarse en el espejo del 61% de
compradores que acudieron a un profesional y se llevaron exactamente el modelo
que buscaban acompañado de contrato de compraventa sin cláusulas abusivas,
garantía e historial de mantenimiento.
En este entorno, donde el
comprador de VO se ha vuelto mucho más demandante, no es de extrañar que el
kilometraje del coche tenga también un papel esencial en la decisión de compra,
siendo el tercer factor más determinante, por detrás del equipamiento y el
precio. Tanto es así que el 45% salió del establecimiento con un certificado
oficial bajo el brazo, que aseguraba que la cifra marcada en el
cuentakilómetros era la real.
Gráfico 1. Aspectos que más
valora el comprador de VO*
*puntuación media del 1 al
5, donde el 5 es lo que más valoran
Fuente: Libro Blanco del VO
de Ganvam
Las emisiones, lo que menos
importa
Aquí hay que tener en cuenta
que prácticamente una tercera parte de estos compradores optaron por coches de
más de 100.000 kilómetros y por tanto de cierta antigüedad –reflejo de un
parque envejecido- lo que explica que aun en este contexto anticontaminación,
las emisiones de CO2 sean prácticamente la última característica en lo que
reparan los conductores.
A pesar de este creciente
protagonismo del vendedor profesional –que ya representa cerca del 40% de las
ventas- no hay que olvidar que todavía más de cinco de cada diez operaciones
con vehículos usados se realizan entre particulares que no ofrecen ningún tipo
de garantía (salvo la referencia al artículo 1484 y siguientes del Código
Civil-). No es de extrañar, por tanto, que sólo el 5% quisiera repetir con la
misma persona.
En este sentido, la vía más
común para llegar a la oferta es recurrir a un desconocido a través de
Internet, habiéndose convertido en el canal de contacto más importante en este
momento. De hecho, el boom de aplicaciones de compraventa entre particulares
explica que el 75% de las operaciones se cierren ya por este canal, frente al
28% de hace apenas dos años.
Los compradores que
financian su VO, a la baja
Por otro lado, el Libro
Blanco del VO muestra cómo la mejora de la economía tiene también un impacto
directo en el comportamiento del comprador. De esta forma, cada vez son más los
españoles que consiguen ahorrar para ajustar la compra de su usado al gasto de
partida, lo que explica que se haya reducido drásticamente de un 42% a un 5%
los compradores a particulares que financian la totalidad del coche.
Por el contrario, aumentan
de un 16% a un 27% los compradores que financian cerca de la mitad de la compra
en los círculos profesionales, lo que pone de manifiesto que la apertura del
grifo del crédito mejora la calidad del mercado de VO, propiciando que los
conductores antepongan seguridad y fiabilidad a precio.
Si entramos al detalle en
cuestiones presupuestarias, a la hora de cumplir el techo de gasto, los hombres
y especialmente los de mediana edad son más cumplidores –un 84,8% lo respeta-,
mientras las mujeres son más gastadoras pues sólo el 74,6% se ajusta a la cantidad
prevista.
El usado, primera opción de
compra para ocho de cada diez
Dilemas presupuestarios al
margen, lo que parece indiscutible es que el usado se ha consolidado en estos
últimos años como solución de movilidad. De esta forma, se ha convertido en la
primera opción de compra para el 80% de los conductores que se decantaron por
este mercado, lo que supone un incremento de diez puntos en los últimos dos
años. Además, se mantiene en más de la mitad –concretamente en un 55%- el
porcentaje de compradores reincidentes.
Según el presidente de
Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres, “el usado adquirido a un profesional, ya
sea compraventa o concesionario, tiene ya poco que envidiar al nuevo en cuanto
a cumplimiento de las expectativas de sus conductores. De hecho, la mitad de
dichos compradores se declara, en términos generales, satisfecho con su
experiencia. No puede decir lo mismo quien optó por un particular, donde ni
siquiera la confianza con el vendedor es una garantía de éxito. De hecho, las
compras a un amigo o familiar apenas representan entre el 5% y el 8%”.
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