ADIÓS AL BATMAN SOLIDARIO

El video se convirtió en viral. Se grabó en marzo de 2012, cuando la policía de Silver Spring, en el estado de Maryland (EEUU), detuvo al que parecía un chiflado a bordo de un espectacular Lamborghini negro. No tanto porque iba disfrazado de Batman, como porque en lugar de una placa de matrícula autorizada, llevaba una con un símbolo del superhéroe.

La grabación apenas llega a los dos minutos, suficientes para que los agentes (extremadamente amables en todo momento) terminen no llevándoselo detenido, sino sacando fotos con sus teléfonos móviles del personaje y de su coche.

Se trataba de Lenny B. Robinson, un empresario que tras hacer fortuna con un negocio de lavado de coches, decidió dedicar parte de su tiempo y dinero para una causa de lo más noble: visitar a niños enfermos en hospitales y centros pediátricos. Siempre, caracterizado como el famoso superhéroe, en los últimos años también acompañado por uno de sus hijos en el papel de Robin, el ayudante de Batman. Colaboraba, especialmente, con la ONG Hope for Henry (Esperanza para Henry), dedicada a tratar a niños con cáncer y otras graves enfermedades.

Según han publicado algunos medios estadounidenses, Robinson se gastaba hasta 25.000 dólares anuales en estas visitas, que empezó a bordo de un humilde Chrysler PT Cruiser, para luego reemplazarlo por el Lamborghini con el que fue grabado, aunque en los últimos tiempos se había hecho construir un descapotable a semejanza del icónico Batmovil del año 1966.

A bordo de este regresaba el pasado domingo por la noche cuando encontró la muerte. Según ha comunicado la Policía, Robinson sufrió un problema en el motor del vehículo cuando circulaba por la autopista I70, lo que le obligó a detenerse. Al bajarse para inspeccionar el fallo, fue arrollado por su propio vehículo, golpeado por un Toyota Camry que no pudo evitarlo. El empresario, de 51 años, murió en el acto

Según los agentes, todo fue un cúmulo de mala suerte. El coche había quedado estacionado en parte dentro del carril rápido de la autopista, era de color negro y la zona donde se produjo el accidente, carente de alumbrado público. Por el momento, no se han presentado cargos contra el conductor del Toyota.

Su fallecimiento ha sido lamentado incluso por el Sistema Nacional de Salud Infantil de EEUU. "Enseñó a nuestros pacientes con cáncer a que hay que ser fuerte y sonreír a la esperanza. Lenny era extremadamente generoso con nuestro personal, los pacientes y las familias, y lo vamos a extrañar mucho ", señala uno de sus comunicados.