Lo primero que llama la
atención de este scooter es su diseño (italiano, por cierto, obra de Arkema
Studio), bien definido y con un toque agresivo, que encaja a la perfección con
sus pretensiones deportivas.
Esta deportividad queda patente, también, en sus
reacciones de chasis. Es un modelo pensado no sólo para llevarte de un punto A
a otro B sino para divertirte durante el trayecto. Sí, también un scooter puede
tener su punto pasional y éste es un claro ejemplo de ello. El culpable es un
bastidor totalmente nuevo que cuenta con una distancia entre ejes más corta de
lo normal y una suspensión bien puesta a punto, que juntas logran un buen nivel
de agilidad y aplomo.
Otros aspectos a destacar
son el cuadro de instrumentos digital, la iluminación LED tanto en el faro
delantero (para la iluminación diurna) como en el piloto trasero o los asideros
deportivos para la sujeción del acompañante. La capacidad de almacenaje queda
en manos de un cofre de 40,7 litros en el que cabe un casco integral y de una
guantera en la parte delantera que, por cierto, es estanca y cuenta con una
toma de corriente de 12V.
Los motores disponibles don
dos, ambos monocilíndricos, refrigerados por agua y multiválvulas. El de 125 cc
rinde 14,5 CV y 12 Nm de par; el de 300 cc entrega 28 CV y 30 Nm y se convierte
en el más potente de su categoría.
Los colores que puede tener
el Kymco K-XCT ABS son los ya conocidos en las versiones sin ABS (blanco, gris
y azul), a los que se suma ahora el nuevo Rojo Núcleo que figura en las fotos
que acompañan a este artículo.
Los precios son de 3.599
euros para el K-XCT 125i ABS y de 4.440 euros para el K-XCT 300i ABS. El
seguro, con cobertura de robo, está incluido durante un año.
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