Una iniciativa que ha establecido
un nuevo estándar en el sector. Los conductores respiran mejor porque el sistema impide la entrada en el
vehículo de la mayoría de las peligrosas partículas microscópicas de polvo
fino.
El filtro múltiple ha sido
diseñado específicamente para la plataforma SPA y estará disponible por primera
vez en el nuevo XC90 a principios de 2015. Tiene un diseño más grande que
mejora la interceptación de partículas y polen y está equipado con una capa de
carbón activo que elimina eficazmente un amplio grupo de contaminantes que
pueden afectar a la salud de los conductores.
Los resultados son
impresionantes. Según una prueba de componentes estandarizada, el número de
partículas de polvo fino de menos de 0,4 μm puede ser hasta un 70 % inferior en
un vehículo equipado con el nuevo filtro múltiple mejorado que en un vehículo
que no lo lleve. Esto supone una mejora importante, ya que varios estudios
demuestran que las partículas de polvo de menos de 10 µm pueden provocar
problemas de salud, entre los que se encuentran las dificultades respiratorias
y las infecciones pulmonares.
«Hasta el 45 % de la
población del mundo industrializado padece actualmente algún tipo de alergia o
hipersensibilidad». Más del 10 % tiene asma. En Volvo, nuestro compromiso con
la seguridad va mucho más allá de los cinturones de seguridad y los airbags.
Consiste en asegurarnos de que cada minuto que usted y su familia pasan dentro
de un Volvo sea tan seguro como sea posible, y esto incluye el aire que
respiran», señala Peter Mertens, vicepresidente primero de Investigación y
Desarrollo. «Con este filtro nos hemos puesto a la vanguardia del sector en
relación con la separación de partículas».
El filtro es uno de los
elementos del novedoso sistema de calidad del aire interior (IAQS) de Volvo.
Otro elemento es un sensor que controla las sustancias nocivas del aire
entrante. Si el nivel de sustancias perjudiciales comienza a ser demasiado alto
(como sucede cuando se atraviesa un túnel, por ejemplo), se cierran
automáticamente las entradas de aire del vehículo. Juntos, el filtro múltiple y
el sensor mantienen a raya a varios contaminantes dañinos y molestos, por
ejemplo:
• Óxidos de nitrógeno
• Hidrocarburos
• Ozono troposférico
• Gases y olores
desagradables
El planteamiento «Zona
limpia»
El filtrado del aire
exterior es solo la mitad del enfoque holístico destinado a mejorar el entorno
del conductor. La otra mitad, que consiste en minimizar las emisiones nocivas
dentro del vehículo, es igual de importante. En Volvo Cars tenemos en marcha una
serie de programas para lograr este objetivo.
Por ejemplo, los conductores
pueden ver que, cuando desbloquean sus vehículos por control remoto, el sistema
de ventilación del habitáculo ventila el interior en un minuto para eliminar
olores y emisiones antes de que ellos entren.
Pero, de hecho, nuestro
esfuerzo por minimizar las emisiones interiores comienza mucho antes de que
empiecen a fabricarse los vehículos, a través de un control muy riguroso de las
sustancias que pueden utilizarse en su interior. En este aspecto, Volvo Cars
lidera el sector en cuanto al uso de nuevos materiales menos tóxicos y con
menos aditivos perjudiciales.
Volvo Cars también ha
implantado un riguroso programa de pruebas para supervisar y controlar las
emisiones. Este programa incluye evaluaciones por parte del «equipo olfativo»
de Volvo Cars, cuyos miembros se dedican a oler distintos objetos para
determinar si su olor es aceptable o si es demasiado fuerte. Lo que se conoce
como «olor a coche nuevo» es, en realidad, un pequeño nivel de emisiones de los
materiales. Estos niveles no entrañan ningún peligro, pero, en días calurosos
pueden alcanzarse concentraciones irritantes para las personas hipersensibles.
Otro componente del programa
es la prueba de simulación solar, en la que el vehículo se calienta hasta que
en su interior se alcanza una temperatura de 65 ºC para simular las condiciones
de un vehículo aparcado al sol en pleno verano. A continuación se miden las
emisiones de TVOC (compuestos orgánicos volátiles totales) y aldehídos. Volvo
tiene un límite de TVOC muy estricto porque unos niveles altos en el aire
interior pueden provocar dolores de cabeza, náuseas, mareos y ataques de asma.
Los aldehídos también están limitados porque provocan alergias respiratorias y
de contacto (especialmente el formaldehído). También hemos reducido el níquel,
otra fuente de alergias de contacto cuando procede de las superficies
metálicas.
Con la atención puesta en la
salud y el bienestar, la iniciativa «Zona limpia» encarna el espíritu de la estrategia
de trabajo de Volvo Cars, totalmente centrada en las personas. Una estrategia
que está en perfecta consonancia con la sensibilidad de nuestro tiempo: los
consumidores de todo el mundo están cada vez más concienciados sobre las
repercusiones de la calidad del aire sobre la salud y piden un aire más limpio
en el interior de sus vehículos. También en esto, Volvo Cars seguirá marcando
el camino.
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