El 43 por ciento de las víctimas de accidentes de tráfico
en 2012 sufrió un esguince cervical en el siniestro, según un informe publicado
por el Centro de Estudios de Seguridad Vial creado por Ponle Freno (iniciativa
del grupo Atresmedia) y la aseguradora Axa.
La mayoría de estas lesiones son de carácter leve (el
97,6% del total): esguinces de todo tipo, fracturas sin complicaciones o el
'latigazo cervical', que se puede traducir en diferentes tipos de patologías,
desde dolor y rigidez de cuello, dolor de cabeza o debilidad del hombro hasta
mareos o vómitos.
Mientras, las lesiones de gravedad intermedia representan
el 2,1% del total de las registradas. En este ámbito se incluyen lesiones como
fracturas complejas o similares, que requieren una media de seis meses de
recuperación. Finalmente, las lesiones consideradas graves (las que dejan
secuelas para toda la vida, como amputaciones, lesiones cerebrales,
tetraplejias o hemiplejias) aumentaron ligeramente en 2012, pasando del 0,17
por ciento del total al 0,19 por ciento.
En general, el estudio señala "una tendencia al
alza" de lesiones de esgince cervical, con un aumento de ocho puntos
porcentuales respecto a 2011. "La tendencia al alza de las lesiones
cervicales nos indica que es necesario reforzar el trabajo en la prevención,
con gestos sencillos como colocar correctamente el reposacabezas y mantener la
distancia de seguridad", apunta el director general del Centro de Estudios
de Seguridad Vial, Josep Alfonso.
Entre los consejos para evitar este tipo de lesiones:
comprobar que la altura del reposacabezas esté en línea con la parte superior
de la cabeza, ajustar el respaldo del asiento para que el reposacabezas quede
lo más cerca posible de la cabeza pero sin que ésta se apoye o situar el
respaldo lo más vertical posible y no separar la espalda de él.
Además, en el caso del conductor, es recomendable estar
atento al retrovisor para poder anticiparse a un posible alcance trasero y
tensar el cuerpo ante un posible choque.
Una vez que se ha sufrido un latigazo cervical, los
médicos rehabilitadores recomiendan retirar el collarín cervical en 24 o 48
horas como máximo si se ha colocado sin existir subluxación o fractura
vertebral. Si no existe contraindicación, iniciar lo antes posible una
rehabilitación que incluya, siempre, ejercicios simples y progresivos que
deberían poder hacerse 2 o 3 veces al día en el domicilio del paciente.
Iniciar lo antes posible las actividades cotidianas que
no supongan una sobrecarga sobre la zona cérvico-dorsal o evitar posiciones
mantenidas de la columna cervical durante periodos prolongados de tiempo
(muchas horas frente al ordenador, conducir de forma continuada), son otras de
las recomendaciones más comunes.
El informe también analiza la evolución de este tipo de
lesión por comunidades autónomas y señala que las que se vieron afectadas por
un mayor peso de este tipo de lesiones son Murcia (donde el esguince cervical
supone el 59,4% de las lesiones de tráfico), Cantabria (53,7%) y Asturias
(51,9%). Mientras, donde menos casos de este tipo se registraron fue en
Canarias (31,6%), Castilla-La Mancha (33,7%) y Madrid (35,4%).
Respecto a 2011, la evolución ha sido especialmente mala
en Baleares, donde el latigazo cervical se ha disparado 24 puntos porcentuales,
y Murcia (17 puntos porcentuales de aumento).
El informe está realizado con una base muestral de 46.035
víctimas de accidentes de tráfico en 2012, a partir de los datos internos de
Axa. El Centro de Estudios Ponle Freno-Axa es un proyecto que nace tras la
entrada de la aseguradora Axa como socio estratégico de Ponle Freno.
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