La Dirección General de Tráfico (DGT) no da tregua ni
descanso en su lucha contra la siniestralidad vial. Si bien, hace una semana se
hacía público que tras las pertinentes reparaciones las autovías y autopistas
contaban con 850 radares para controlar estrictamente que se cumplan los
límites de velocidad, ahora se activará una campaña especial de control de
velocidad del 20 al 26 de agosto, que será más intensa en las carreteras convencionales.
De esta forma se pretende recordar a los conductores que
el no respetar las velocidades indicadas no les librará en caso de ser pillados
por uno de tantos radares de las carreteras españolas, de pagar la pertinente
multa, cuestión que preocupa a casi un 80% de los automovilistas que han visto
como el incremento de vigilancia unido a la crisis económica hace difícil
escapar de las pertinentes sanciones.
Por eso y aunque esté permitido en la actualidad portar
detectores de radares en los coches, habrá que poner especial cuidado sobretodo
en las carreteras secundarias, durante estos días para finalizar agosto sin
infracciones ni posibles sustos.
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