El Toyota 2000GT fue el coche con el que la industria
automotriz japonesa anunció que podía competir con los mejores del mundo. Una
unidad sale a subasta.
El Toyota 2000GT es uno de esos coches que nos
compraríamos si tuviésemos dinero por castigo. El coche se mostró por primera vez
en el Tokyo Motor Show de 1965 y supuso todo un punto de inflexión para la
percepción de los automóviles japoneses en el mundo. Hasta entonces, los
fabricantes de automóviles japoneses eran vistos como unos imitadores de
diseños que producen coches baratos, insignificantes, diseñados para el extremo
inferior del espectro de la automoción (exacto, como los chinos hoy).
El diseño del Toyota 2000GT levantó muchas pasiones… y
siempre ha sido una enorme fuente de controversia en la comunidad
automovilística. Hay quien le otorga el mérito a Albrecht Goertz (un protegido
del estilista Raymond Loewy y creador del fabuloso BMW 507, por ejemplo). Otros
apuntan que el máximo responsable había sido Satoru Nozaki.