ÉRASE
UNA VEZ EL COCHE
Si los coches desaparecieran
de nuestros paisajes de la noche a la mañana, ¿creen que el mundo notaría su
ausencia?
Imagínense que se despiertan
una mañana, y en lugar de coches, la sociedad utilizara para desplazarse otros
tipos de artefactos que hicieran menos contaminantes, más rápidos y más baratos
su utilización. ¿Podría vivir esta sociedad en un mundo sin coches? ¿Cómo
afectaría la desaparición de los coches a nuestra vida diaria? y sería posible
la relocalización de todo lo que mueve los coches hoy día en nuestra sociedad,
empresas de todo tipo, concesionarios, seguros, recambios, diseños,
especialistas, etc. Estoy seguro que el mundo cambiaría con la desaparición del
coche. ¿Estamos preparados para ello? ¿Creen que el coche es un producto en
extinción?
El parque móvil de todos los
países del mundo, sobre todo de los países desarrollados se está haciendo cada
vez más viejo. ¿Por qué los usuarios aguantan más con sus vehículos? El poder adquisitivo, los contratos laborales
transitorios, y la poca fiabilidad de los bancos a los compradores hacen que el
coche, en el mejor momento de su existencia en cuanto a diseño, equipamiento,
tecnología y seguridad está en su peor momento. ¿Pero nuestros bolsillos se
pueden permitir cambiar de vehículos con la misma facilidad que lo hacíamos
hace quince o veinte años?
Hoy, los precios de los
vehículos en comparación con los de hace veinte o treinta años, pueden estar en
correlación con aquellos, lo que hoy, no existe es la confianza de los bancos para
que podamos acceder a estos préstamos y hacer frente a ellos con seguridad. A los
hechos me remito. Solo falta ─sin dar ideas─ que salten al ruedo social los
okupas de coches.
Hoy los vehículos debido a las
nuevas tecnologías hacen de los coches un producto más interesante para el
comprador, por sus motores, diseños, equipamientos, seguridad…lo tienen todo.
Pero, también, un vehículo no está protegido, no sé si por qué tipo de
administración, pero de cara al futuro, como tal, solo serán unos pocos los que
podrán disfrutarlo.
Cuantías altas en los sellitos,
falta de estacionamientos en los barrios, accesos restringidos al centro de las
ciudades, no hay sitios para estacionar, o la zona azul controla el tiempo a
golpe de monedas. Las revisiones, los peajes, un sinfín de inconvenientes que
hacen de la utilización del coche un verdadero engorro.
Esos mismos lectores y amigos,
creen que la apuesta del futuro por otros nuevos sistemas de movilidad hace que
el coche pase a mejor vida. Se agruparán las empresas de automoción, habrá menos
personas cualificadas trabajando en estas empresas, o los concesionarios se
convertirán en páginas web. Y no me hagan que les explique todas las demás factorías
que tienen una relación directa o indirecta con el mundo de la automoción.
Las empresas están haciendo
balances económicos de sus cuentas de resultados, están buscando soluciones de
futuro a medio plazo, para ver por dónde van a ir las cosas…Pero estoy convencido
que no es un problema de los profesionales del sector, que son auténticos,
grandes profesionales, hay que pensar en el futuro del coche con mayúsculas, y
hay que pensar seriamente, ya.
Proponer un Plan urgente para
ayudar al vehículo privado, o pensar en otras alternativas de movilidad
públicas o privadas, o crear un paisaje donde puedan convivir ambas.
Las distintas asociaciones
relacionadas con los vehículos, cada mes nos marcan las
tendencias económicas del sector, estén atentos a los vehículos privados,
comerciales eléctricos, industriales, etc. Nos alegramos mucho cuando las
líneas verdes de ventas superan a las rojas, pero no es oro todo lo que reluce.
Y cada uno desde su responsabilidad, tenemos que ponernos manos a la obra, si
no queremos que en un futuro no muy lejano tengamos que ir a ver un vehículo
turismo a uno de esos museos que tanto están creciendo a lo largo de nuestra
geografía para recordar los primeros modelos, o aquellos que marcaron época.
Eso sí, llamamiento a nuestros
gestores políticos, no dejen este tema de la mano de Dios, son muchas las
criaturas que hoy por hoy, nacen, viven y se desarrollan gracias al COCHE.
Aunque, algunos coches ya
despegan del asfalto sus cuatro ruedas, no creo que en los próximos 30 años
veamos un coche volar de forma habitual, para eso ya tenemos avionetas, no creo
que sea la solución a un problema que
les he estado planteando, sobre todo, porque no se trata de hacer vehículos más
caros, sino hay que intentar seguir haciendo vehículos para que los usuarios
puedan seguir comprándolos y disfrutándolos.
Por eso, no quiero ni pensar
que volvamos a hacer la casa por el tejado, y en poco tiempo estemos recordando
una época en la que el coche revolucionó la sociedad industrial y no nos
tengamos que arrepentir de algo que pudo
haberse solucionado y mañana solo sea un recuerdo.
Con afecto, y respeto,
Pepe Bejarano
todomotorsevilla@gmail.com
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