• Del 5 al 7 de abril en el Circuit de Barcelona-Catalunya
• El inicio de las series Peter Auto también tiene un sitio para la historia
¿Qué mejor lugar que un evento estelar como Espíritu de Monjuïc para celebrar el cincuenta aniversario de dos leyendas de nuestra automoción?
La cita inaugural de las series de Peter Auto, que se celebrará en el Circuit de Barcelona-Catalunya durante los días 5, 6 y 7 de abril, presenta lo mejor de los clásicos de competición, ocho categorías diferentes para un total de más de 250 coches de carreras que abarcan seis décadas de carreras de resistencia y de velocidad en circuito. Precisamente a finales de los años 60 se estrenaban en nuestro país los SEAT 1430 y SEAT 850 Sport Spider, que de entrada no estaban pensados para las carreras y cuyo gran triunfo fue motorizar y hacer soñar a todo un país con brío y estilo.
En 1969 salían al mercado estos dos modelos diametralmente opuestos, que demostraban el dinamismo y crecimiento de un mercado automovilístico prometedor. El SEAT 1430 iba a ser conocido como “catorce treinta” y era una berlina familiar cuyo nombre hacía referencia a su cilindrada original de 1.438cc. Con el tiempo, el 1430 recibiría los famosos motores biarbol de 1.600cc y 1.800cc conocidos como versiones FU e incluso brillaría en competición y serían la base para auténticos coches de rally que triunfarían en las carreteras de todo el país.
El SEAT 850 Sport Spider fue el no va más de la gama 850, nacida en 1966 como un pequeño coche utilitario que mutó en coupé deportivo con mucho estilo. La versión cabrio salió en 1969 y se basaba en el 850 Sport Coupé, con motor de 903cc y 52 CV. Originalmente no se llamaba Spider sino que así fue bautizado popularmente. Su estilosa carrocería diseñada por Giorgetto Giugiaro lo hacía llamativo e incuestionablemente bonito, logrando transformar una base utilitaria en un precioso objeto de deseo.
SEAT Coches Históricos estará presente en Espíritu de Montjuïc con estos modelos de su colección que estarán expuestos junto con otros muchos de la colección en la carpa SEAT en el centro del paddock. De esta forma podremos volver a admirar estos icónicos modelos de nuestra automoción, impecablemente restaurados y para muchos aficionados irresistibles hoy en día, quizá más deseables aún que hace cinco décadas.
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