La presencia de la
tecnología en nuestras vidas es continua. El 82% de los hogares ya cuenta con
ordenador y el 90% de las personas mayores de 15 años tiene teléfono móvil
(datos del estudio “Las TIC en los hogares españoles” realizado por el
Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la SI). Pero estas cifras
son sólo una pequeña muestra del constante uso que se realiza de estos
dispositivos y de la importancia que tienen en nuestro día a día.
Cada vez hay más
herramientas o aplicaciones que nos ayudan a diario: relojes que monitorizan tu
actividad física, aspiradores robot, etc. Todos ellos son ejemplos de la
denominada telemática, concepto que ha llegado también al mundo del motor. Pero
no hablamos de la Formula 1 ni de Moto GP, sino de los vehículos que usan los
ciudadanos de a pie. Tantas son las prestaciones que ofrece la tecnología a la
seguridad y a la conducción, que, por ejemplo, el Parlamento Europeo ya ha
aprobado la implantación del sistema de llamada de emergencia “eCall” en los
vehículos que salgan de fábrica a partir del 31 de marzo de 2018.
Principalmente son
las aseguradoras las que están apostando por la telemática debido a las grandes
ventajas que suponen tanto para ellas como para sus clientes. En concreto, el
aumento de la seguridad de sus conductores se ve traducido en una mayor
posibilidad de reducir la gravedad de los heridos en un accidente de tráfico o,
incluso, en poder salvar 2.500 vidas al año, según estimaciones del propio
Parlamento Europeo. Y es que, gracias a la telemática aplicada al coche, la
aseguradora será capaz de saber al instante que se ha producido un accidente y
dónde se encuentra el vehículo. Reduciéndose así el tiempo de llegada de los
servicios de emergencia.
Además, la telemática
también permitirá, entre otras cuestiones, localizar el vehículo en caso de
avería o robo. De esta manera, las aseguradoras ofrecerán un servicio más
completo ante los siniestros e incluso podrán evitar los fraudes al tener la
capacidad de reconstruir, de una manera más fiable, los hechos ocurridos.
Otra ventaja de la
tecnología en los vehículos es la posibilidad de que las aseguradoras conozcan
mejor los hábitos de conducción de sus clientes para así adaptarse a sus
demandas. De esta manera, los asegurados podrán recibir precios personalizados,
evitando, por ejemplo, primas muy altas. Hay quien habla de que se podría
acabar con el mito de que los seguros de coche para jóvenes son caros, ya que
gracias a la telemática se podrán valorar sus habilidades como conductor, y no
sólo la edad. Aparte, el asegurado también se verá beneficiado, ya que tendrá
acceso a los datos de su conducción, lo que le permitirá conocer más
detalladamente cómo conduce y ser así más eficiente con su vehículo.
Aunque la mayoría de
aseguradoras coinciden en que esta tecnología es un gran proyecto de futuro, el
alto coste de su implantación está ralentizando su llegada al mercado. A pesar
de ello, desde Helvetia Seguros apostamos por los grandes beneficios que ofrece
la telemática y, por eso, hemos puesto en marcha una experiencia piloto con
nuestros clientes. Se trata de Helvetia Good Driver, una aplicación para móvil
con la que los usuarios podrán conocer cómo conducir de una manera más segura y
eficiente. Después de cada trayecto, el móvil ofrecerá estadísticas sobre la velocidad,
brusquedad y distracciones durante el viaje.
Así, el usuario podrá
saber cómo mejorar y, por ejemplo, ahorrar en combustible o conseguir un menor
desgaste de las ruedas, entre otras cuestiones. Además, el conductor irá
acumulando puntos que posteriormente le permitirán participar en sorteos
mensuales de atractivos regalos. Si quieres saber más sobre esta aplicación,
accede en el siguiente enlace: www.helvetia.es/app/good-driver
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