España recibe cada año más de 60 millones de turistas de otros países.
Muchos vienen en avión, otros en tren, pero también hay centenares de miles que
llegan aquí en coche, lo que ha provocado que España sea uno de los países
europeos donde se tramitan más accidentes de coches con matrícula extranjera.
La Oficina Española de Aseguradores de Automóviles (Ofesauto) recibió el
año pasado 26.293 consultas sobre coches con matrículas que habían sufrido
algún tipo de percance en carreteras nacionales (un 5% más que en 2013), según
se desprende de su Informe Anual de Gestión.
El número total de accidentes con vehículos extranjeros implicados puede
ser ligeramente inferior porque hay ocasiones en que la consulta se hace por
duplicado o porque no coincide con un caso real, explica Joaquín Ortiz Crespo,
director del área de servicios de soporte de este organismo,
De todas estas consultas, Ofesauto se encarga de tramitar alrededor del
75%. Cuando el vehículo accidentado tiene una aseguradora con corresponsal en
España, este toma las riendas de la gestión del siniestro.
Ofesauto es el encargado de contactar con las aseguradoras extranjeras y,
en muchos casos, de adelantar los pagos. El organismo tiene reconocidas 1.509
compañías aseguradoras extranjeras pertenecientes a 47 países, de las cuales el
66% (993) disponen de un corresponsal designado en España para la gestión de
siniestros.
Francia acapara el 20% de las reclamaciones
La procedencia de los automóviles que sufrieron algún tipo de percance está
muy correlacionada con los principales países de origen del turismo. De los
6.776 casos que gestionó Ofesauto en 2014, el país de donde procedían la mayor
parte de los coches accidentados el año pasado es Francia (1.357
investigaciones, el 20%), seguido de Reino Unido (605), Alemania (511) y
Portugal (458). En la lista también aparecen países que han registrado un
importante flujo migratorio hacia España en los últimos 10 años, como Rumanía
(431 vehículos siniestrados) y Polonia (402.
“En Ofesauto somos el garante de la responsabilidad civil de los vehículos
extranjeros que circulan por España. Es decir, que nos hacemos cargo de los
daños que puedan provocar a otras personas y coches mientras conducen por
nuestras carreteras”, apunta Joaquín Ortíz Crespo.
Si el vehículo extranjero siniestrado no tiene corresponsal en España,
Ofesauto paga los daños ocasionados y luego busca a la compañía. Si no tienen
seguro, Ofesauto paga y después reclama la devolución de las cantidades
entregadas al Consorcio de Compensación de Seguros del país originario del
vehículo.
De los casos en que Ofesauto inicia una gestión, no todos acaban en el pago
de una indemnización, bien porque se localiza antes a la aseguradora o porque
es la compañía de otro vehículo implicado quien abona los daños causados.
Durante 2014 se abrieron 1.852 expedientes indemnizatorios a través de los
cuales se han pagado 5,8 millones de euros por accidentes ocurridos en España
causados por vehículos extranjeros.
Coches españoles fuera
Ofesauto también gestiona los accidentes de vehículos con matrícula
española que ocurren en el extranjero sin contar con ningún seguro, o cuando la
aseguradora española no tiene representación en el país donde se ha producido
el incidente.
En 2014 tramitaron 4.783 siniestros de este tipo (frente a los 5.155 en
2013). Los accidentes de vehículos españoles fueron principalmente en países
europeos como Francia y Alemania. En las carreteras galas se produjeron 1.181
accidentes con vehículos españoles (un 25% de las gestiones realizadas por
Ofesauto) y en las alemanas, 843. Por detrás aparecen Reino Unido (619 casos),
Italia (535) y Rumanía (435) y Marruecos (316).
Por estos siniestros, Ofesauto pagó 3,7 millones euros en concepto de
indemnizaciones, en un total de 731 expedientes (aquellos en los que el
vehículo español fue el responsable de los daños). Abonadas estas cantidades,
el organismo recobra el dinero de la aseguradora o del Consorcio de
Compensación.
Ofesauto es una asociación de carácter privado formada por todas las
entidades aseguradoras autorizadas para trabajar en España el ramo de
automóviles.
Asegurados gracias al sistema de la Carta Verde
La Carta Verde es un documento de seguro reconocido en 45 países (todos los
de Europa, y algunos de África y Asia) que acredita que el vehículo está
asegurado en los países que figuran en el propio documento y que han firmado un
acuerdo específico. También se conoce como la Carta Internacional de los
seguros de vehículos de motor.
Al circular con la Carta Verde (por el color del documento) se acredita que
el vehículo está asegurado como mínimo, con el alcance y los límites
cuantitativos de la ley del seguro de responsabilidad civil de vehículos a
motor del país donde se cause el accidente.
No es preciso disponer físicamente de la Carta Verde para cruzar las
fronteras en la Unión Europea (UE), ya que cada póliza de seguro de automóvil
emitida en un estado miembro de la UE garantiza la cobertura mínima de seguro
requerida por la ley en otro estado miembro. Tampoco para hacerlo por otros
países del Espacio Económico Europeo, como Islandia, Noruega, Suiza,
Liechtenstein o Andorra.
En los países donde no es obligatorio circular portando la Carta Verde, el
aseguramiento deberá ser acreditado mediante documento fehaciente en vigor
(póliza de seguro, recibo al corriente de pago, etc).
En cualquier caso, al tratarse de un documento con contenido estandarizado
para los países adheridos al sistema, es recomendable llevarlo siempre consigo,
ya que facilitará cualquier trámite en caso de necesidad.
En España, las compañías de seguros son las que facilitan la Carta Verde
junto con la póliza de seguro de sutomóvil.
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