El emblemático modelo de la
marca del león, que se lanzó al mercado en 1935, fue el primero en incrustar
los faros dentro de la calandra y en seguir los pasos de la corriente artística
estadounidense “Streamline Moderne” en Europa.
Fue pionero en equipar un
techo de acero descapotable y escamoteable en el maletero, y su versión coupé
corrió en el último 24 Horas de Le Mans justo antes de la II Guerra Mundial. Un
pedazo de la historia de la automoción que cumple 75 años desde que se dejó de
fabricar en 1942.