Unos 600.000 se ponen al volante con una agudeza visual
inferior a 0,5, según el informe "El estado de la salud visual de los
conductores en España, 2017".
- La agudeza visual de los conductores profesionales debe ser de al menos el 0,8.
- Sus autores advierten de la relación directa entre mala visión y accidentalidad.