El Tribunal General de la
Unión Europea (TUE) ha dado este jueves la razón a los ayuntamientos de Madrid,
París y Bruselas en su recurso contra la decisión de la Comisión Europea de
establecer unos nuevos límites para las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx)
de vehículos diésel superiores a las que fijaba la norma anterior y ha anulado
dichos topes.