La limpieza, la imprudencia o
el aparcamiento son algunos de los factores más frecuentes que generan roces o
arañazos en los coches
Una de las grandes prioridades
de todo conductor es que su coche se mantenga impoluto e intacto en su vida
útil, a salvo de indeseados golpes o arañazos.
Hay factores que los generan
que escapan al control de todo propietario de un vehículo, como, por ejemplo,
cuando por la mala fe de alguna persona marca con intención la carrocería de un
coche para que su dueño se lo encuentre con dibujos que desluzcan la carrocería.