Un crossover japonés equipado
con un motor diésel y un cambio automático. Es casi el tipo de coche nipón que
más vemos por nuestras carreteras. Es bastante común, pero en este caso es un
Subaru. Y sabemos que la firma de Fuji Heavy Industries, por suerte, no hace
nada como los demás. De hecho, este Subaru Outback es casi algo inaudito en el
mercado, se trata del primer coche con motor bóxer diésel asociado a un cambio
automático de variación continua.
En Europa, Subaru es más
conocida por susImpreza STI que por el resto de su gama. Es así. Sin embargo,
en algunos mercados, como Suiza (su primer mercado europeo) el Reino Unido y
España, la marca goza de una buena reputación, la cual va más allá del genial
STI. En ambos mercados, el Forester y el Legacy Outback son las piedras angulares
de su éxito.