Siempre se suele asociar AMG a la creación de
superdeportivos para Mercedes-Benz. No en vano esta división perteneciente al
fabricante alemán es la encargada de crear las versiones de altas prestaciones
de la gama de la marca de la estrella. Modelos de espectaculares líneas capaces
de soprepasar los 250 km/h de velocidad máxima.
Pero no es el de los superdeportivos el único campo en el
que trabaja AMG, ya que también los todoterreno de Mercedes pasan por sus manos
para convertirlos en poderosos modelos de alta potencia y capacidad, como los G
63 AMG y G 65 AMG.