- Las marcas deberán reducir las emisiones medias de sus coches a 95 g/km de CO2
- Los fabricantes están reduciendo la potencia compensándolo con turbocompresores
- También se está investigando aceites de motor de baja viscosidad
La legislación de la Unión
Europea (UE) establece que el conjunto de todos los vehículos que matricule
cada fabricante en Europa en 2020 deberá emitir de media 95 g de CO2 por
kilómetro. Lo que no significa, como algunos cuentan con cierto desatino, que
todos los coches que se vendan a partir del 1 de enero del próximo año tengan
que emitir por debajo de ese límite. Se trata de un promedio. Por tanto, si una
marca tiene un coche que emite, por ejemplo, 120 gramos, deberá tener otro
modelo que no pase de los 60 gramos para poder compensar.