La artesanía es una tradición centenaria en Japón, un país donde las habilidades más meticulosamente perfeccionadas pasan de generación en generación, para crear objetos hermosos moldeados por manos expertas. Ese toque humano –la inmensa atención al detalle que solo las personas, a diferencia de la tecnología, pueden conseguir– es la clave que hace de Lexus y sus vehículos algo único.