En medio del acalorado debate que
suscita todavía la circulación de coches autónomos, las empresas españolas lo
tienen claro. Lejos de querer echarles el freno, casi la mitad (49%) se muestra
a favor de incorporarlos a sus flotas, por considerarlos una solución eficaz
para garantizar la seguridad de sus empleados en la carretera, según revela la
última edición del Observatorio del Vehículo de Empresa (CVO) promovido por
Arval, compañía de movilidad de BNP Paribas.