Que los vehículos todocamino
se han convertido en el segmento más interesante para cualquier marca no es
ningún secreto. A falta de Ferrari, que ha manifestado en más de una ocasión
que jamás fabricará un coche de este tipo (el tiempo dirá si es cierto o no),
se cuentan por decenas los fabricantes que han decidido pasar por el aro
crossover para aumentar sus ventas. Sin ir más lejos, se han unido a esta
fiesta recientemente nombres tan ilustres como Bentley o Maserati. Incluso
Rolls Royce parece tener casi a punto de salir del horno su propio modelo.