Si hay un elemento dentro de
los automóviles que no deja de crecer, ese es el de las pantallas. Hoy en
día ya mueve una barbaridad de dinero,
13.400 millones de euros al año y se prevé casi duplicar esa cifra, hasta los
26.700 millones, ya en 2025. Bosch no es ajena a ello y está desarrollando una
nueva tecnología que suma imágenes 3D en las pantallas del cuadro de
instrumentos.