Javier García podría estar hablando horas y horas de cómo
se desarrolla el asiento de un coche. Y es que detrás de este elemento hay un
intenso trabajo: desde la elección del tipo de espuma, tejido, estructura, e
incluso, puntadas en el cosido, hasta toda una serie de pruebas para garantizar
su funcionalidad y resistencia.
“Nosotros lo que buscamos es que la mayor parte de las personas con
diferente morfología, diferentes alturas y pesos tengan una buena sensación de
confort”, explica este ingeniero responsable de pruebas de asientos en el
Centro Técnico de SEAT.