CEDA EL PASO

LUZ V-16

 

Las nuevas medidas de la DGT para este 2021 incluyen la obligación de llevar en cada coche una luz V-16, un tipo de baliza —según la RAE, señal fija o móvil que se pone de marca para indicar lugares peligrosos o para orientación del tráfico marítimo, aéreo y terrestre— de luz amarilla de 0,8 - 2,2 Hz. Esta noticia, publicada en diversos medios y divulgada por Tráfico, llegó a mi conocimiento cuando la leí en la página digital del Diario de Sevilla, y la mayoría de los párrafos aparecen tal como los publicó ese medio informativo. Hago esta aclaración para que quede constancia de que no ha habido ningún intento de plagiar… Solamente informar a los lectores de esta novedad tomando esa fuente como referencia: “Al César lo que es del César”. 

¿Pero en qué consiste? 

Se trata de una luz intermitente que se llevará en el interior del coche y se puede colocar en el techo sacando la mano por la ventanilla. Se fija de forma magnética y se activa automáticamente. Cuenta con una batería que tendrá una vida de alrededor de un año y medio, y tiene una autonomía de unas dos horas y media en modo de emergencia. Su precio ronda los 20 euros. Gracias a este nuevo artilugio, no se tendrá que abandonar el vehículo para señalizar que estamos parados en la carretera por una avería. 

¿Este mecanismo tiene que estar homologado? 

Pues sí, tiene que estar homologado. En cuanto a los modelos más conocidos y fiables, podemos destacar el que ha sido diseñado por dos ex guardias civiles y que ya está homologado: la Help Flash. La marca Motorkit también cuenta con un modelo homologado que puede ser algo más económico que el citado anteriormente. Algunos de esos modelos ya están disponibles en ciertas plataformas de venta online. 

“Total, un “sacaero” de dinero”, dicen ya algunos suspicaces. “Tienes que comprarlo y si no lo llevas en el coche, te multan”. Hombre, va a ser un proceso paulatino, pues la nueva normativa de la DGT se aprobará en los primeros meses del año y se prevé que a partir de 2024 estas señales luminosas sean las únicas válidas legalmente. Por lo tanto, este año, en caso de accidente o avería podrán usarse tanto estas luces como los triángulos, ya que se ha iniciado una fase de cambio que finalizará en 3 años, cuando se podrá utilizar únicamente la luz V-16 como elemento de señalización, quedando totalmente prohibidos los triángulos. 

Y es que a pesar de la reducción de la circulación por la pandemia, en 2020, las cifras por atropellos en carretera han aumentado respecto al año anterior. Sobre todo, las autoridades de Tráfico apuntan que se siguen produciendo muchos de estos atropellos, más frecuentes durante la noche, por averías del vehículo, que obligan a los conductores a moverse por la carretera y a abandonar el coche para colocar los triángulos. Tengan en cuenta que como ya recoge Cervantes en la “Segunda parte del ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha” publicada en 1615: “De noche todos los gatos son pardos”. 

Esta expresión, al parecer, se originó poco después de trasladarse a Madrid la capital del Reino (1561), convirtiéndola en Villa y Corte. Y curiosamente, la mayoría de los historiadores apuntan que la mención que se hace al gato no es por el felino, sino por los madrileños, ya que los nacidos en esa ciudad son conocidos como “gatos”. Es más, el refrán no se refiere a la dificultad del órgano de la vista para distinguir objetos por la falta de luz… Advierte de la facilidad que algún impostor tiene para engañar a un confiado haciéndose pasar por otra individuo. La referencia a la noche es porque al oscurecer, lógicamente, es más difícil distinguir a una persona de otra. 

Pero continuemos con la luz V-16. Con esta medida, como ya hemos dicho, el objetivo principal de la Dirección General de Tráfico es reducir el número de víctimas de accidentes en el asfalto, ya que solo en lo que respecta a trabajadores de asistencia en carretera, han fallecido casi una decena de personas por falta de señalización durante el pasado año. Así que seamos positivos, el precio no es tan gravoso y puede salvar vidas, incluida la del que ha hecho el desembolso.

Ojalá todos los problemas tuvieran una solución tan económica y tan cómoda como la implantación de la luz V-16… No nos tendremos que bajar del coche a colocar los engorrosos triángulos con el ya mencionado riesgo de nuestras vidas, y evitaremos la molestia de tener que llevarlos en el maletero. Yo, personalmente, creo que merece la pena el cambio… Es mi modesta opinión. 

Con mis mejores deseos, saludos cordiales. 

Fernando Monge 

fmongef@gmail.com