Volvo Cars ha establecido un marco de financiación verde, el Marco de financiación verde , destinado a financiar su ambicioso plan climático y su estrategia de electrificación a través de la emisión de bonos verdes o la obtención de préstamos verdes.
Volvo Cars prepara así el terreno para la emisión de su primer bono verde. La financiación obtenida a través de él se utilizará para financiar nuevos modelos de vehículos eléctricos, nuevas plataformas de vehículos y nuevas tecnologías de motores, así como para aumentar la capacidad de producción de baterías y vehículos eléctricos.
El Green Finance Framework de Volvo ha sido revisado por el centro internacional de investigación Cicero, el evaluador principal independiente de marcos de inversión en bonos verdes, que le ha concedido la máxima calificación posible: la Dark Green.
«Volvo Cars tiene uno de los aviones climáticos más ambiciosos del sector automovilístico», ha declarado Håkan Samuelsson, director ejecutivo. «Nuestro Marco de Finanzas Ecológicas permite a los inversores participar en la transformación de Volvo Car, una transformación que convertirá a la compañía en un fabricante de vehículos eléctricos».
Volvo Cars presentó el año pasado su plan climático integral, cuyo objetivo es reducir paulatinamente las emisiones de carbono en todas sus operaciones y productos de manera que, antes de 2040, sus actividades no tienen ningún impacto sobre el clima.
Este plan no se limita al objetivo de reducir las emisiones de escape mediante la electrificación; también se reducirán las emisiones de carbono en la red de fabricación y las operaciones generales, así como en la cadena de suministro y en las operaciones de reciclaje y reutilización de los materiales.
Como primer paso concreto para alcanzar esta visión en 2040, la empresa se ha propuesto reducir la huella de carbono de todos sus vehículos a lo largo de su vida útil en un 40% entre 2018 y 2025.
El plan contempla reducir en un 50% las emisiones de escape por vehículo, en un 25% las emisiones de carbono por vehículo en todas las operaciones, incluidas las de fabricación y logística, y en un 25% las emisiones de carbono por vehículo en la cadena de suministro.
«Para los próximos años, tenemos ambiciosos planes de inversión que nos permitirán convertir en realidad nuestros objetivos climáticos», comenta Carla de Geyseleer, directora financiera. «En este momento, me complace ofrecer a la comunidad financiera la oportunidad de realizar inversiones centradas en la sostenibilidad de Volvo Cars, ya que el sector financiero juega un papel fundamental a la hora de fomentar y apoyar el desarrollo sostenible».
Volvo Cars fue el primero de los principales fabricantes de vehículos que se comprometió con la electrificación integral y es la única marca que ofrece una variante híbrida enchufable de todos los modelos de su gama. En los próximos años también introducirá una gama de modelos totalmente eléctricos, comenzando con el XC40 P8 Recharge, que entregas comenzarán a finales de este año. Durante la primera mitad de 2020, casi una cuarta parte del total de sus ventas en Europa correspondió a vehículos híbridos enchufables. Según datos de IHS, Volvo Cars fue durante este periodo la marca premium número uno de vehículos híbridos enchufables en Europa. Para 2025 la compañía pretende que la mitad de su volumen de ventas globales corresponda a vehículos totalmente eléctricos y el resto a vehículos híbridos.
Más información sobre el Marco de Finanzas Verdes de Volvo Cars AQUÍ.
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