El medio alemán Süddeutsche
Zeitung se ha hecho con un informe confidencial denominado como “Enfoques y
sugerencias para mejorar la promoción de la movilidad eléctrica en Alemania“.
En 23 páginas de informe,
Volkswagen señala las condiciones para promover el vehículo en Alemania y el
interés del fabricante para popularizar este tipo de movilidad. Este interés de
Volkswagen puede pasar por los problemas que ha tenido con el diésel, como
también, porque es posible que no cumpliera con la futura normativa CO₂ propuesta por la UE. El CEO
de Volkswagen, Herbert Diess, declaró recientemente sobre el objetivo de CO₂ de menos 37,5% para 2030 que
necesitaría para cumplirlo de una ventas del 40% del total en vehículos
eléctricos.
La primera conclusión que VW
extrae en este informe es que los incentivos actuales al coche eléctrico y la
infraestructura de recarga no son adecuados para cumplir con esos objetivos en
Alemania ni en Europa.
VW propone que se cree un plan
de incentivos económicos para facilitar vehículos eléctricos por un precio
inferior a 20.000 euros y se dé acceso a una red gratuita de recarga; esta
parte tendría que ser abonada por los fabricantes de automóviles, las
eléctricas y el gobierno alemán.
Otro punto que señala VW es
que se debe de incentivar con más ayudas a los vehículos más pequeños, en el
informe se señala unos 5.000 euros para los del segmento B mientras que el
resto no debería recibir más de 2.000 euros.
Otro “enemigo” de este plan
para VW son los incentivos a los híbridos enchufables, ya que estos llevan un
motor térmico y producen emisiones; propone VW un calendario de incentivos,
desde 2020 y hasta 2022, únicamente con 1.500 euros, siendo eliminada esta
ayuda para estos vehículos.
En Alemania desde el 1 de
enero de este año los impuestos a los vehículos híbridos y eléctricos se han
reducido a la mitad con respecto a un gasolina o diésel, sin embargo VW exige
que en 2023 salgan de esta rebaja los híbridos, abonando el 75% de lo que
corresponda a un vehículo convencional.
Finalmente, en el informe de
VW se ahonda en la necesidad de infraestructura para la recarga, señalando que
es necesaria una fuerte inversión. Uno de los puntos clave para VW en Alemania
es que hay 35 000 aparcamientos con 60 a 80 plazas, si se legislase en el
sentido de obligar a instalar al menos dos puntos de carga eléctrica, podría
aliviarse la infraestructura pública prevista; eso sí, también estos
establecimientos necesitarían de ayudas para la instalación.
Un informe interesante porque
señala que en prácticamente toda Europa no estamos preparados para la
transición al vehículo eléctrico, veremos cómo responden las autoridades a los
planes de VW.
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