domingo, 28 de agosto de 2016

ASÍ AFRONTA LA INDUSTRIA ESPAÑOLA DEL AUTOMÓVIL LO QUE QUEDA DE AÑO

España fabricará más de 2,8 millones de coches en 2016, tras hacer 1,6 millones en el primer semestre. La llegada de nuevos modelos a las plantas y el Brexit incidirán en la segunda mitad del año.

Las previsiones de fabricación de automóviles para 2016 están por encima de los 2,8 millones de unidades con el objetivo de asaltar los 3 millones en 2017. En la primera mitad del año, de las 13 fábricas españolas que ensamblan vehículos han salido más de 1,6 millones de unidades, lo que supone un 11% más que en el mismo periodo de 2015.


Según las estimaciones, la segunda mitad del año sería menos productiva que la primera y se harían 400.000 vehículos menos. Esto supone una desaceleración, pero no es preocupante para las fábricas españolas, ya que cuentan con carga de trabajo suficiente para los próximos ejercicios gracias a nuevas adjudicaciones.


La llegada de esos nuevos modelos provoca obras de adaptación en las instalaciones fabriles que conllevan paros en la producción. Implica, además, que en varias de las plantas se están fabricando vehículos que están en el ciclo final de su vida. Es el caso del atípico Ibiza en Martorell, que lleva ocho años en el mercado y que, en 2017, será sustituido por una nueva generación.

Martorell, al frente
Martorell es la planta más productiva en 2015 y la que más lleva este año en el primer semestre -246.800 unidades, casi un 7% menos-. En la planta barcelonesa, Seat está acometiendo obras en la línea 1 para acoger tanto al Ibiza nuevo como a su derivado de todocamino que llegan el año que viene.

Además, aunque fueran unas 10.000 unidades, dejó de fabricar el año pasado el monovolumen Altea. El grupo Volkswagen va a invertir 3.300 millones en Seat hasta 2019. Esto incluye la llegada a Martorell del Audi A1, que sustituirá al actual todocamino Q3.

Lo mismo ocurre en Renault Valladolid. Cerrará el año con 252.000 unidades, 6.000 menos que en 2015. No porque el Captur haya decaído en ventas, sino porque este modelo va a recibir una actualización al encontrarse en la mitad de su ciclo de la vida.

Sin embargo, Renault ha adjudicado más carga de trabajo a sus centros españoles hasta 2020. Valladolid, que es la planta más productiva de la alianza Renault-Nissan, tendrá un nuevo modelo en 2018 y una fundición de aluminio inyectado.

Más producción tendrá también la planta de Villamuriel de Cerrato (Palencia), donde Reanult fabrica el Mégane y el todocamino Kadjar. En el primer semestre salieron 179.000 coches, un 90% más que en el mismo periodo del año anterior, gracias al éxito del Kadjar, que se empezó a fabricar a finales 2015. Su alza compensa la caída del 2% en la planta de Valladolid.

PSA Vigo ha elevado un 8% su producción en el primer semestre, con 243.200 unidades. El Citroën C-Elysée es un superventas en el sector del taxi, al mismo tiempo que se ha recuperado el ritmo de las furgonetas Partner y Berlingo, que también están en el ciclo final de su vida.

PSA ha adjudicado a Vigo la nueva generación de estas furgonetas y el Peugeot 2008, un todocamino de gran volumen, lo que supondrá unas inversiones de 700 millones y el final del actual Expediente de Regulación de Empleo. De hecho, se va a aprovechar las tres semanas de vacaciones de verano para realizar obras de adaptación para la llegada de las nuevas furgonetas de Peugeot y Citroën 2018.

Figueruelas, la planta de Opel (General Motors), atraviesa un año de transición. Consolidada la fabricación del Corsa y las 20.000 unidades del Mokka, está adaptándose a la nueva generación del Meriva y su derivado en el grupo francés PSA que se hará en la factoría zaragozana. En el primer semestre ensambló 210.000 unidades, más de un 1% menos, y espera que su producción caiga en esos términos en el año, manteniendo el empleo.

Obras de cara a 2017
Volkswagen Navarra está en obras para recibir la nueva generación del Polo en 2017. Más adelante, en 2018 llegará otro modelo, el Polo todocamino, lo que va a suponer 1.000 millones de inversión. Landaben tiene el modelo más fabricado en España, el Polo, que con 174.000 unidades y en su último año de ciclo de vida crece un 11%.

La que está a pleno rendimiento es Ford Almussafes, cuya producción subió un 17%, hasta 226.000 unidades. Con estos números podría sorprender que la compañía pretendiera suprimir 430 empleos temporales en el último trimestre. Empresa y sindicatos han logrado un acuerdo para fabricar 200 coches menos al día y una reducción de jornada que evite los despidos.

La incertidumbre del Brexit incide en las previsiones de demanda de coches en Europa, principal destino de los vehículos fabricados en España. También subyace en esta decisión de Ford el hecho de que la crisis ha variado la forma de producir. Ya no hay stock porque "cuesta dinero y sólo fabricamos bajo pedido", explica Manuel Guillermo, director de Renault Valladolid.

Por eso, Ford, que prevé una caída de sus ventas en Europa en el segundo semestre impulsada por el Brexit, ha ajustado sus niveles de producción.

Auge y negociaciones

En pleno auge se encuentra la factoría de Mercedes-Benz en Vitoria, que va a recibir 41 millones de euros para potenciar la producción de las furgonetas Clase V y Vito con la incorporación de un tercer turno. La producción espera rondar las 140.000 unidades este año, ya que, en el primer semestre, se ha incrementado un 52%, hasta 71.700 unidades.

Iveco producirá más vehículos este año en España, donde fabrica en exclusiva sus camiones pesados. Madrid, en las instalaciones de la antigua Pegaso, ha hecho 14.200 unidades, un 13% más, mientras que Valladolid sube un 69%, hasta 13.700 unidades.

El problema es que el incremento de la planta pucelana se debe a la mayor demanda de la furgoneta Daily, producto que la factoría pierde el 31 de diciembre. A partir de esa fecha, las plantas de Iveco en Valladolid y Madrid sólo harán camiones Stralis y Trukker.

Nissan Ávila produjo 8.800 camiones, un 22% más, pero está inmersa en un conflicto laboral por la posible falta de trabajo más allá de 2018. Empresa y sindicatos están negociando flexibilidad para poder acceder a nuevos modelos.


La planta de Nissan en Barcelona redujo su producción un 2% por las peores previsiones de ventas del Pulsar, pero el Brexit abre una ventana a esta planta y a las de Renault en España. De complicarse la situación en Reino Unido, Nissan podría derivar producción de Sunderland a las factorías españolas. El Infiniti Q30 a Barcelona y el Nissan Qashqai, a Renault Palencia.

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