Nueve estaciones ofrecerán a los usuarios de esta
iniciativa 23 puestos, distribuidos en la capital, Fuengirola y Marbella
Las obras de
instalación de los postes de carga rápida para los vehículos eléctricos de los
usuarios participantes en el proyecto ZeM2All (Zero Emissions Mobility to All),
que permitirá probar a nivel internacional 200 de estos coches, ha comenzado
esta semana en la capital malagueña.
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La propuesta,
encabezada por la Agencia de la Energía del Área de Nuevas Tecnologías del
Ayuntamiento de Málaga, cuenta con una flota de 200 vehículos, que podrán ser
cargados en cualquiera de los 21 puestos que se instalarán en siete estaciones
en diferentes puntos de la capital. También se colocará un puesto en Fuengirola
y otro en Marbella.
En la capital,
las estaciones se ubicarán en las avenidas Comandante García Morato y
Jenofonte, los aparcamientos públicos de Carlos Haya, la avenida de Andalucía y
El Palo, las sedes municipales en el antiguo edificio de Tabacalera y el parque
de ocio Plaza Mayor.
En cuanto a
Fuengirola, este punto de recarga estará en el acceso al parque comercial
Miramar, y en Marbella, en la avenida Ricardo Soriano, junto al Palacio de
Congresos.
Estos puntos
permitirán cargar el 80 por ciento de la batería de los vehículos en 30
minutos, según han informado desde el Ayuntamiento de Málaga en un comunicado.
En estas semanas
se está procediendo a la selección de las personas, empresas y organismos que
participarán en el proyecto y que dispondrán de los vehículos eléctricos.
Bonificaciones
en el SARE y aparcamientos subterráneos, la posibilidad de acceder a zonas
restringidas, la reserva exclusiva de plazas o la bonificación del 75 por
ciento del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) son algunas de las
medidas que se pondrán en marcha para apoyar el uso del coche eléctrico.
EMPRESAS JAPONESAS Y ESPAÑOLAS
Este proyecto
piloto se enmarca en la iniciativa Smart Community System, impulsada por un
consorcio que integran empresas niponas --Mitsubishi Corporation, Mitsubishi
Heavy Industries e Hitachi-- y españolas --Endesa, Telefónica y Sadiel-- y
apoyado por NEDO --la organización para el desarrollo de nueva tecnología
industrial y de la energía, dependiente del Ministerio de Economía, Comercio e
Industria japonés-- y, en España, por el Centro para el Desarrollo Tecnológico
Industrial (CDTI).
La inversión
prevista para cuatro años es de 60 millones de euros, de los que casi 50
millones son aportados por el Gobierno japonés y el resto, por el CDTI y por
las empresas españolas participantes en esta iniciativa.
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