- Los sistemas de conducción autónoma emplean un sofisticado conjunto de sensores y procesadores; y sistemas avanzados de Inteligencia Artificial, con redes neuronales convolucionales (CNN) y transformadoras (TNN), las mismas que se usan en los modelos de IA con procesamiento del lenguaje natural tipo ChatGPT.
- ¿Cómo reconoce su entorno un coche autónomo?, ¿cómo determina a qué prestar atención y qué ignorar? y ¿cómo puede saber qué van a hacer los vehículos y peatones que tiene a su alrededor?. El sistema funciona con tres actividades de conducción autónoma separadas y cooperativas: “percepción”, “predicción” y “planificación”.
- En la era de la conducción autónoma, la correcta recalibración de las cámaras tras un cambio de parabrisas será aún más importante, pues la información que proporcionará al sistema se empleará no solo en situaciones puntuales de peligro (como sucede actualmente con los sistemas ADAS), sino en todas las tareas relacionadas con la conducción.
La tecnología de conducción autónoma sigue avanzando, con un desarrollo tecnológico y proyectos piloto de numerosas marcas y actores, en diferentes partes del mundo, que los va acercando progresivamente a su implantación real. Los conductores ya pueden disfrutar del germen de estas tecnologías con los sistemas avanzados de asistencia a la conducción ADAS, que suponen los primeros pasos hacia una conducción automatizada.