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Unos
jovencísimos Pedrosa y Márquez haciendo sus primeros pinitos en el mundo del
motor o un adolescente Andrés Iniesta antes de convertirse en uno de los
mejores jugadores del mundo. La pasión por los retos difíciles y la firme
creencia en poderlos hacer realidad, el espíritu de superación, constancia,
esfuerzo... tener un sueño y luchar cada día por conseguirlo. Este es el
espíritu de Honda y de nuestros protagonistas: incluso en los momentos
difíciles continúan luchando por alcanzar sus sueños.
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